Bonita película, poco conocida inexplicablemente. Con unos paisajes de ensueño y con un grupo de actores que la hacen ser un trabajo más que aceptable. Kevin Kline siempre me gustó, actor fuera de lo que se conoce como Star System, discreto y profesional, aquí lo vuelve a demostrar. Junto a él la inglesa Kristin Scott Thomas, interesante actriz a la que siempre rodea en sus personajes un halo de frialdad, pero que gusta. La revelación de la película ha sido el guapísimo Hayden Christensen en el papel más difícil de todos, saliendo ganador con sobresaliente. La joven Jena Malone tiene un futuro prometedor en esto del cine, se está abriendo poco a poco su camino y la secundaria Mary Steenburgen está correcta como siempre. Merece la pena verla, creo que está basada en una novela con la que me tengo que hacer, es muy bonita.