Me gusta el cine español, el cine hablado en nuestro idioma, con nuestras expresiones, con nuestros actores, que los tenemos y muy buenos, por cierto. Esta película me ha parecido una pequeña joyita , austera y discreta, pero con un trasfondo real que deja mal sabor de boca. La vida no es de color de rosa, no es un cuento de hadas, es puta y jodida y duele y aquí nos lo recuerdan. Mercedes Sampietro es una maravilla, una señora del cine discreta y austera como lo es la película en sí, está excelente al igual que Silvia Munt, totalmente de acuerdo con otro usuario en que es una de las actrices que mejor expresa en su rostro el sentimiento de dolor y tristeza. Disfruté de nuevo con el actor portugués Joaquim de Almeida y Abel Folk, en un papel muy secundario, vuelve a estar más que correcto. Pero del elenco de actores me quedo con la mirada impresionante de Alex Brendemühl y la naturalidad de la joven Aina Clotet, me han conquistado. Película no apta para los que viven en los mundos de Yupi, buen cine español.