Cuando los buenos aficionados ponemos dieces a muchas películas que no son excepcionales es porque nos gusta reconocer en los directores y demás gente el esfuerzo que han hecho por agradar, aunque la película no sea de 10. Esta película promete pero no termina de cuajar, luego no agrada en absoluto.

Esta es una historia que quiere enternecer y para que no sea una mierda absoluta debe conseguirlo; hay que dotarla de sentimientos, en fin, proporcionar algo de humor tierno con el que sus personajes nos lleguen al corazón y en parte se consigue. Es una película tonta con un Johnny Depp repetitivo y cansino, una la insoportable MichellePfeiffer y una pobre Eva Green obligada a exagerar. El mejor: el mayordomo, el auténtico valor de la película. Aunque se puede ver, me ha parecido una película idiota y cursi que ha querido representar el amor en vampiros sin alma, y no se ha tenido en cuenta que el alma primero tiene que estar en la película.