Me recuerda mucho más a "Juegos sucios" que a un telefilm de sobremesa. Compro el argumento de ser un recurso muy manido: la histérica obsesionada con algo o alguien, encima rubia y guapa. Pero... enseguida etiquetamos una película cuando vemos que se van cumpliendo uno a uno cada uno de esos clichés. Sin embargo,
no importa el qué, sino como se desarrolla. Son 80 minutos de delicioso delirio, discúlpenme, nada tiene que ver con la clásica película de antena 3 aunque el guion sea similar. Hay que tener un don para saber ofrecer un producto tan utilizado que mantenga la tensión hasta el final.

Visionarla es un acierto y darla una crítica acertada para animar a verla también. No sean injustos.