Una película algo dura, sobre todo, por la represión policial que sufre esta mujer, apellidada Collings en el estado de Filadelphia, debido a que se tiene que separar unos meses de su hijo, por cuestiones del trabajo, (telefonista). Hasta, que ve que le envían otro hijo. Ya que a un psicópata que les mata.
Que desde luego, es verdad lo que dice, pero la toman por loca.


Un final, triste, y de lucha por recuperar a un ser querido, animada por los relatos de los niños recuperados por su familia y de los niños que lo cuentan, sobre todo, de uno que utiliza el psicópata para captarlos.