De nuevo hacen de la ambetnacion un gran acierto. Sigue siendo marca de la serie el cambio de ambientación y su belleza en tomas. No solo eso, sino que allí donde la llevan adaptan la acción a esas localizaciones. Se siente Londres en cada escena, podrías coger escenas sueltas y tendrías claro donde es.

Respecto a los coches, menos tuning y más clásicos. Por mi aún mejor, auténticos cochazos.

El argumento sigue atando hilos con toda la saga. Se recalca cada vez la importancia de los personajes y de la “familia”. Este sentido de familia empieza a pasar de ser algo bueno a glorificar criminales y a poner en riesgo a millones de personas solo por una persona.

La acción es muy buena. Hace lo que tiene que hacer subiendo en epicidad y escala película a película. Tiene pinta de ser proporcional al presupuesto. Si comparas las historias de criminales en una ciudad de la primera, con tono global de esta es alucinante la diferencia. Sin embargo, al haber crecido la escala poco no se siente tan extraño.

Las flipadas y el tipo de cosas que solo pasarían en una película aumentan y se pasan de rosca en ocasiones (el salto del puente, en el secuestro no tiene sentido que le dejen marchar y luego le persigan, que el villano se traiga a mía a España etc.).

Final perfecto, cuando creías que ya estaban todos los cabos atados en las anteriores entregas, hacen que tenga sentido tener una más y darte cuenta que este es aún más final. Un efecto muy difícil de lograr, pero masterizado en este film.