Desde luego, el gran triunfo de Disney Pictures de 2008 fue "WALL·E", que para mí hizo palidecer no sólo a cualquier película de animación de ese año, sino que ya la considero una de las diosas universales en esa categoría.
Otra producción del mismo año y de la misma compañía como es "Bolt" (a excepción de que en ésta no intervino Pixar Animation Studios) queda indudablemente eclipsada, pero no deja de ser una opción más que aceptable y muy, muy disfrutable para todo tipo de público, sobre todo, como no podía ser de otra forma, del menudo.
El pequeño público (y también no tan pequeño) se lo pasará en grande con las simpatiquísimas y moviditas aventuras de un perrito adorable que ha sido criado y entrenado para proteger encarnizadamente a su querida amiga Penny. Pero hay algo anómalo... Todo lo que él cree real (los peligros, los enemigos, sus propios "superpoderes"...) forma parte del gran engaño de la televisión, porque él no sabe que es el protagonista canino de una serie que alcanza grandes cotas de audiencia y, por lo tanto, todo lo que lo rodea es ficticio. Todo... excepto el cariño de Penny, que es auténtico.
Bolt nunca ha salido al mundo exterior, ha pasado cada uno de sus días, desde que Penny lo eligió en la perrera, dentro de los estudios televisivos, convencido de que es un perro dotado de poderes especiales y cuyo único objetivo es la seguridad de su amiguita humana.
No ha crecido como un perro normal y corriente. Penny intenta sacarlo a ratos de todo ese ambiente, pero el equipo de la serie está demasiado temeroso de que Bolt descubra que su mundo es falso.
Pero, accidentalmente, nuestro héroe canino saldrá de la caravana en la que lo recluyen y de los estudios de Hollywood, para encontrarse perdido a miles de kilómetros y en un entorno extraño en el que las reglas no son las que él conoce.
Bolt realizará un largo viaje de descubrimiento, de riesgo real, de amistad, de lealtad irrompible, y de madurez. Aprenderá a ser un perro corriente, ganará nuevos amigos y se dará cuenta de que un héroe no necesita ser un superdotado. Sólo necesita estar impulsado por el amor y por la determinación.
Ágil y divertida, conmovedora y tierna, con muy buena fotografía, excelentes efectos de animación, diálogos desternillantes y los temas musicales de John Powell, "Bolt" está destinado a ser uno de los clásicos Disney de siempre.