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Voto de Vivoleyendo:
4
Drama. Comedia Margot Zeller (Nicole Kidman), además de ser una inteligente escritora de relatos cortos, es una mujer neurótica y manipuladora. Se presenta por sorpresa, con su hijo Claude (Zane Pais), para asistir a la boda de su hermana Pauline (Jennifer Jason Leigh), a la que no ha visto en mucho tiempo. En cuanto conoce a Malcolm (Jack Black), el futuro marido de su hermana, empieza a sembrar cizaña para frustrar la boda, consiguiendo que poco a ... [+]
27 de julio de 2009
11 de 14 usuarios han encontrado esta crítica útil
Baumbach intenta un estilo rompedor, de semi-documental con fotografía inquieta y arbitraria, montaje con aire estudiadamente cutre (cortes bruscos e inesperados, como si hubieran metido la tijera sin ton ni son) y un argumento errático, tanto o más chirriante que el montaje, sobre una familia desestructurada que tiene muchas probabilidades de sacar papeletas para el manicomio.
El hilo central son dos hermanas que se quieren tanto como chocan entre sí, que lo mismo rajan cada una a las espaldas de la otra o se dicen lo mucho que se quieren, o se tiran los trastos, todo ello en intervalos de cinco minutos a lo sumo. Como las olas que van y vienen, que van y vienen sin cesar. Las dos son madres, ninguna de las dos ha llevado o lleva una vida sentimental boyante (algún fracaso matrimonial pasado o presente y muchos líos con tipos de toda calaña), sus vidas han estado marcadas por una infancia de negligencias paternas y muchos tumbos, y son mujeres de carácter muy voluble y desequilibrado. De tan extravagantes (¿o realistas?) como las quieren pintar, llegan a descarrilar con bastante estridencia, hasta un punto en que yo ya desesperantemente tenía la sensación de que Baumbach buscaba a toda costa el drama-comedia indie cool del año. Que seguramente no es así y el hombre tenía las mejores intenciones, pero a mí no se me ha quitado el sonsonete en todo el rato.
Margot es la hermana mandona que constantemente critica los gustos de su hermana Pauline. Desaprueba a su futuro cuñado (un Jack Black tan pasado de rosca que es como cuando una tiza rechina sobre una pizarra, o sea, insufrible), pero pese a todo ha decidido ir a la boda de ambos, acompañada de su hijo adolescente. Desparramando las desavenencias a voz en grito, criticando por detrás, y con diálogos del tipo "mamá, anoche me masturbé en el baño, o "tu madre está cañón y me la tiraría", o "mi hermana es una gilipollas", o "mamá, ¿estás colocada?", o "tengo el escroto más largo que el pene", y un sinfín de frases curiosas. Todo ello desarrollado en un ambiente crispador, insertando de vez en cuando temas musicales y con la cámara bastante mareada. Bueno, y añadiendo las perlas de algunas frases segadas limpiamente cuando aún ni siquiera han terminado de decirlas, porque o el montador tenía un presupuesto de risa, o el día que le dio por hacer su trabajo estaba tan colocado como Margot. Eso sí, película llamativa lo es un rato. Pero tan grotesca que tiene la virtud de ponerme de los nervios.
Vivoleyendo
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