Una cinta navideña por naturaleza que posee un bonito mensaje de fondo que apunta a encontrar el lado espiritual de las fiestas de Navidad dejando de lado el aspecto materialista en el que todos caemos indefectiblemente.
Por otro lado el filme es entretenido desde su narración, la cual combina momentos hilarantes y burlescos con otros más reflexivos donde vemos cómo el personaje principal va redimiéndose en su alma dejando de lado el rencor y la venganza para dar lugar a sentimientos más puros y nobles.
Otro punto muy a favor del filme es la gran actuación de Jim Carrey, quien compone un personaje simpático y dinámico. Gran labor de este actor quien expone todo su talento histriónico gracias a su carisma y sus ampulosos ademanes.
No es un tópico menor el de encomiar todo el aspecto estético de la cinta, gran ambientación con unos escenarios de ensueño donde el colorido es la factor rutilante que sobresale, diseño de arte atrayente, a lo que le sumo la idílica y bufonesca partitura de James Horner en la que se destaca la canción "Where Are You, Christmas?" interpretada por Faith Hill.