Nos encontramos ante un documental desconcertante, y de dicho desconcireto nos alerte Banski desde el primer momento "El documental iba a ser sobre mi, pero apareció un tipo más interesante que yo". Sin tener claro donde están los límites de lo real o lo inventado, si que creo que este documental no solo es una certera crónica del mundo del arte más moderno, audaz y provocador que se está desarrollando en nuestros dias, sino sobre todo de lo que es arte, y más aun sobre a quien se le puede considerar un artista.

El mundo del arte callejero que aquí se nos muestra está muy bien descrito, es interesante, fresco, trasgresor y en él se introduce con su cámara una especie de bufón o friki, que de un día para otro se acaba convirtiendo en un artista como los que retrataba con su cámara.

El documental es gracioso, tiene ritmo, está lleno de buen rollo, y nos muestra muy bien un movimiento cultural muy en alza que renueva el arte pop, y que como con Warhol, nos hace preguntarnos si copiar objetos u otras obras, añadiendoles algún elemento extraño incongruente con el contexto de las mismas, es arte. Yo no lo tengo claro, y además creo que cuando Banski duda de la obra de Mr. Brainwash, también lo hace sobre si mismo.