Si, ya sé que resulta sorprendente, pero lo he comprobado, y han tenido que pasar más de 110 años desde que se inventó el cine, para que España, se adentrará en el mundo del western (para mi el género cinematográfico por excelencia) de una manera seria.

La película es francamente interesante, y la historia muy sugerente, está contada con fuerza y sobriedad, se confirma como un notable ejemplo de western crepuscular, y contiene momentos visuales fastuosos (toda la parte del desierto de sal me parece impresionante).

Si que puede dar la impresión tras terminar de ver el conjunto que la historia sea más poderosa que su ejecución, y es que quizás los hilos sentimentales y de amistad entre los personajes no terminan de traspasar la pantalla, Noriega no me termina de convencer, el personaje de Rea quizás hubiera merecido un mayor recorrido, y la parte juvenil del protagonista sea demasiado liviana.

No obstante, con imperfecciones sus méritos superan ampliamente a sus defectos, es una película sumamente interesante, diferente, arriesgada, contra toda lógica dentro del cine actual y muy valiente.

Recomendable.