De todos los papeles que está eligiendo Nicolas Cage últimamente para acabar definitivamente con su carrera (mención honorífica a ese amago de película y adaptación que se llama Ghost Rider), el vidente de “Next” es uno de los menos carismáticos y peor interpretados. Está bien que el tipo este casi acabado y que necesite dinero para vivir pero eso no es excusa para presentarse en la cutre filmación que le toca, actuar mal como si le pagaran extra por eso y cobrar el cheque de rigor para largarse contento a su mansión. Un mínimo de esfuerzo no le haría nada mal a la película.

Eso respecto a Nicolas Cage, el resto del reparto trata de superarlo en cuanto a parálisis facial (Julian More y Jessica Biel hasta dan pena), el guión desaprovecha y desperdicia lo que hubiera sido una excelente película de ficción, los efectos especiales saturan y Lee Tamahori aburre.