Aunque con un piloto algo irregular (he oído críticas como que parece que resumieron una temporada en hora y media), sobre todo por el montaje y la rapidez de la trama, es una serie más que decente.

Rick Castle, un escritor de novelas de misterio y asesinatos es llamado por la policía un día porque se encontró un cuerpo de la misma forma que apareció en una de sus novelas (con girasoles y pétalos por encima), trabaja con la policía en ese caso, y como agradecimiento por su ayuda el jefe de policía le permite acompañar a la detective Beckett (que tiene más cabeza y es más interesante que la típica 'chica guapa') durante un tiempo para investigar y reunir información en la que basar su nuevo personaje. A partir de ahí la trama va a caso por capítulo, entremezclando los asesinatos (siempre peculiares por alguna razón) con la vida de los dos protagonistas y la evolución de su previsible relación.

Un personaje secundario a destacar es la madre de Castle (Nathan Fillion): una antigua actriz que se muda a vivir con él y es todo un personaje. Excelente actuación de Susan Sullivan.