Me ha gustado bastante, a la altura de lo que esperaba y quizá un poco más.

Equilibrada, creo que eso la define bastante bien. Si algo podría achacarle, aparte de puntuales «defectillos», es una cierta escasez de humor chispeante (va diluyéndose en ese aspecto). Por lo demás, una peli estupenda, con hermosas imágenes y personajes simpáticos, una historia clásica pero bien llevada. La carga emotiva está bastante centrada, y lo cierto es que quizá el trasfondo da para algún toque de épica que eleve el ritmo. Técnicamente impecable.

Ah, y la protagonista me ha caído francamente bien, es entrañable pese a su papel rebelde. Es de este tipo de películas en las que uno sale con un sabor agridulce del cine. Dulce por haberse metido de lleno en un mundo fascinante... agrio por salir de la sala y volver a la cruda realidad.