Haz click aquí para copiar la URL
España España · Valladolid
Voto de Mrk90:
4
Fantástico. Acción. Aventuras La supervivencia de la humanidad pende de un hilo, pero Beck, un héroe mortal, está decidido a salvar el mundo y a rescatar a su verdadero amor. Para conseguirlo busca la ayuda del poderoso dios Horus, con el que establecerá una alianza contra Set, el despiadado dios de la oscuridad que ha usurpado el trono de Egipto, sumiendo al país en el caos. Para ganar la batalla contra Set y sus secuaces tendrán que someterse a terribles pruebas ... [+]
10 de junio de 2016
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
La cartelera es un campo de minas. Todas las semanas llegan nuevos estrenos a la gran pantalla y los avezados espectadores tienen que esquivar todas esas propuestas mediocres que, afortunadamente, con el tiempo acabarán cayendo en el olvido. Pero, cada cierto tiempo, llegan películas como “Dioses de Egipto”, haciendo ruido y creando una enorme expectación, aunque no por su calidad, sino precisamente por la falta de esta. Ha recibido palos a mansalva por parte de la crítica internacional y ya se posiciona como una de las favoritas a los premios Razzie del año que viene. ¿Es comprensible todo este revuelo? ¿Realmente se merece todos esos varapalos?

Alex Proyas ha demostrado en el pasado que puede ser un director bastante resultón con películas de culto tales como “El Cuervo” (1994) o “Dark City” (1998). Ahora le ha dado por pegar un salto al vacío e intentar sumarse a la moda de los superhéroes, eso sí, echando mano de la mitología egipcia, y el resultado no puede ser peor.
No es solo que el guion sea lo más plano, simple y facilón que se pueda echar uno a la cara, es que el resto de elementos funcionan de forma totalmente opuesta a como están planeados. Y aquí viene el mayor defecto de toda la cinta: Se toma extremadamente en serio a sí misma. Los responsables de este producto demuestran estar convencidos, durante los excesivos 127 minutos de metraje, de que estamos ante la nueva franquicia millonaria de Hollywood e intentan avasallar a la audiencia con escenas de acción espectaculares, personajes carismáticos, chascarrillos y, como no, la promesa de una segunda entrega. Sin embargo, lo único que pudo hacer un servidor fue soltar carcajadas, una tras otra, al ver el espectáculo que tenía ante sus ojos. Y tampoco vamos a ser crueles, hay alguna que otra buena idea, tanto de guion como visual, y la BSO no está mal, pero lo cierto es que todo roza el ridículo, eso cuando no cae en él estrepitosamente.

Culpa de ello, además de la razón mencionada, la tienen unos efectos especiales totalmente desastrosos, sobre todo por lo mal integrados que están los actores en los fondos digitales. El resultado son imágenes tan sumamente falsas que es imposible meterse en la acción, eso si la risa te deja prestar atención (En serio, casi me da algo al ver la cara de Gerard Butler pegada a una armadura digital. El mismo resultado que si recortas la cabeza de una revista y la pegas a la pantalla, tal cual). Y claro, como prácticamente el 100% de los planos contienen algún elemento CGI, la locura está servida. No entiendo cómo han podido abusar tanto de los efectos especiales sabiendo que el resultado iba a ser este. Mención especial también para la pelea en la catarata, donde todo esto se combina con un uso abusivo del “slow-motion” y con un horrorso movimiento circular de cámara que consigue elevar la vergüenza ajena a sus cotas máximas. Además, los actores no ayudan nada, pues ninguno consigue resultar convincente (ni siquiera Geoffrey Rush), cayendo muchos de ellos en la sobreactuación. Si añadimos a la ecuación resoluciones facilonas, momentos estúpidos (comento algunos de forma breve en la zona de spoilers) y deux ex machina a mansalva (aunque estando en una película sobre dioses, a lo mejor hasta tiene sentido), el resultado es...
¡una comedia involuntaria la mar de divertida!

Porque, no lo voy a negar, la película me entretuvo de lo lindo. Es cierto que en sus últimos compases ya estaba pidiendo la hora, le sobran 20-30 minutos perfectamente, pero mentiría si no dijera que me lo pasé como un enano y que volvería a repetir la experiencia sin ninguna duda. Eso sí, no me entretuvo como la película pretende hacerlo, y es que creo poder afirmar que estamos ante la mejor peor película del año. Entiendo las malas críticas, pero no puedo evitar recomendarla encarecidamente a todo el que quiera saber cómo no hacer una película y echarse unas buenas risas. Eso sí, mejor en casa, que pagar el precio de una entrada de cine por ver esto puede considerarse masoquismo.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Mrk90
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow