Clásico de ciencia ficción con el que he disfrutado en su visionado. En estas películas a veces su mayor inconveniente es el paso del tiempo, pero salvo en los efectos especiales que a día de hoy pueden causar risa, estamos ante una obra atemporal y destacable dentro del género.

Un inventor reúne a sus amigos para contarles que ha creado una máquina del tiempo. Estos se lo toman a risa para días después verlo aparecer magullado en medio de una cena y escuchan la historia de lo sucedido. Así mismo el espectador totalmente entregado se apasiona con los hechos que le han acontecido en su viaje hacia el futuro. Sin entrar en paradojas temporales ni nada similar, la película nos adentra en un viaje hacia lo desconocido, un futuro incierto y como sin moverse de un mismo lugar, el entorno va cambiando. Personalmente esta temática me encanta, así que me tenía ganado, aunque la historia en si está muy bien trabajada.

Si es cierto que si bien la primera mitad de la película te tiene totalmente pegado a la butaca y narra unos hechos cuanto menos interesantes, una vez sucede el gran salto al futuro la película se resiente y tiene un bajón notable, resultando de todos modos entretenida en todo momento. Este cambio en la línea de la cinta la priva de ser una obra mayor pero no de ser una obra altamente recomendable para los amantes del género y sobretodo para los que disfrutan con la temática de viajar en el tiempo.

Imposible para los seguidores de The Big Bang Theory (los que hubieran visto la película antes les pasaría a la inversa obviamente) no acordarse del capítulo donde "homenajean" la película de forma magistral.

Nota: 6'5

En twitter: @er_calderilla