Buena propuesta de este film de Finnegan, el cual trata de transmitirnos un mensaje conceptual a partir de una primera escena curiosa de un nido de pájaros en el cual uno de ellos arroja o elimina a los demás para poder sobrevivir y que además es una especie distinta al de la madre. El resto de la película es una similitud a este precepto, extrapolado a la vida humana.

En mi opinión podría interpretarse como sigue:
A la pareja de protagonistas le ha llegado el momento ilusionante y ensoñado de comprar una casa y vivir juntos (típico de la condición humana), por lo que deciden visitar una inmobiliaria para tal fin. La inmobiliaria o agente encarnaría en este caso al sistema socio-económico o sociedad capitalista en el que vivimos forzosamente (es nuestro depredador, el agente apunta unas maneras muy frías y robóticas, por cierto).

El agente o sistema social acaba embaucando a la pareja en quedarse la casa asignada, aunque a ellos no les guste del todo, de manera que quedan atrapados en esta espiral laberíntica (urbanización-vivero-nido) que en un principio creemos que es algo natural y que acabamos aceptando (los protagonistas viven y aceptan ese destino), no sin hacerse muchas preguntas al respecto (qué es esto? Cómo salgo de aquí?).

Finalmente aparece un último elemento que es la figura de un hijo que con todas las dificultades que conlleva el criarlo y educarlo van a minar la felicidad de la pareja, para después acabar siendo éste parte de la sociedad perversa (niño-adulto convertido en agente inmobiliario) que nos esclaviza.

Interesante cinta que a cada uno le sugerirá distintos puntos de vista de la sociedad actual. Incluso se podría interpretar también como un escenario en el que el ser humano es sometido por otra especie superior (recordar la primera escena del cuco en otro nido) que utiliza los medios que tenemos de vivir para llevar a cabo sus necesidades particulares. Como se dice al principio esto sería un acontecimiento "natural", pero cuando el ser humano es la parte perjudicada se ve de una forma muy distinta y desagradable.