Clint Eastwood es una director y actor fabuloso. Es práctico y sabe qué quiere contar sin invertir mucho tiempo en planos o escenas arriesgados que ni suelen ser aceptables ni necesarios. Deja que la grabación siga extrayendo la historia de lugares y actores siempre solventes.

Mula no es una excepción a lo señalado anteriormente. Él actúa siempre bien, o no, pero es muy carismático y eso a veces lo es todo. Bradley Cooper, podría ser un actor más solvente si no tuviese cara de teleñeco, pero la tiene. Eso también le sucede a Dianne Wiest, pese a ser también otra buena actriz. Pero, en definitiva, todos son buenos, y eso Clint Eastwood lo sabe, porque siempre elige bien.

Ver pelis de Clint Eastwood siempre es un acierto. Es como cuando vas a Cortefiel a comprar ropa a tu padre, da igual la temporada o el año, siempre le va a gustar o, al menos, convencer. Da igual Un Mundo Perfecto que Million Dollar Baby, las historias son diferentes, los actores también y los sitios... pero todas son películas prácticas que cuentan una historia sin hacer pensar mucho al espectador. Su truco tal vez sea que son muy, muy creíbles y está siempre él.