La insuperable "Seven" fue imitada con diversos niveles de acierto por todas las producciones que a partir de mediados de los '90 aparecieron en las pantallas de todo el mundo. El género del thriller sobrenatural con tintes policíacos alimentó a raudales a diversos formatos, desde cómics hasta novelas, y dio lugar a grandes películas y otras (las que más) un tanto mediocres.

"Fallen" se sitúa en algún lugar entre el limbo de producciones a salvar de la quema que podrían clasificarse como hijas directas de "Seven". La historia que se narra es interesante en su forma más que en su contenido, pues no nos cuenta nada nuevo (la posesión infernal ya nos la han contado muchísimos directores de cine, desde Wes Craven hasta Sam Raimi). Denzel Washington en su papel de escéptico policía le da, como casi siempre, la tensión que requiere un thriller de estas características, y brillantes secundarios como Donald Sutherland o John Goodman ponen la guinda a un pastel con buena ambientación y cuidadas escenas.

A pesar de ello, la película adolece de cierto ritmo y las escenas vistas desde la perspectiva del demonio tienen un cierto regusto a rancio, recordando a "Predator" en esa característica pero sin conseguir dar el miedo que daba la visión infrarroja del bicho espacial. Además, el filme intenta sorprender con un final que no convence demasiado, lo que le quita muchos enteros a su nota final.

Lo mejor, sin duda, es dejar la sala de cine con el "Sympathy For The Devil" de los Rolling Stones dentro de tu cabeza.