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España España · pobra
Voto de jesus:
8
Drama Crónica tensa e intensa de 24 horas en la vida de tres compañeros de juerga que van dejando un reguero de destrucción, de sexo equívoco y reprimido, y también cerrando puertas tras tirar las llaves, como si de manera deliberada buscaran la perdición. (FILMAFFINITY)
23 de noviembre de 2014
15 de 22 usuarios han encontrado esta crítica útil
Desconozco los anteriores trabajos de su director, desconozco en el sentido de que no los vi, pero visto lo hecho en esta película será cuestión de buscarlos.
Basada en la novela de Blanco-Amor hace un trabajo genial haciendo una reproducción del libro más que fiel.
Los tres protagonistas principales se salen en sus respectivos personajes, en especial Antonio Durán "Morris" que hace una interpretación del personaje de "Milhomes" llena de matices y que si hubiera justicia debería estar nominado en los Goya de este año. Su risa histérica, su mirada perdida de no saber que trama, sus peleas-arrumacos con su compañero "Bocas" interpretado por Karra Elejalde, en todo está perfecto. Y mucho más valor tiene que sea un actor que pese a parecer que se encasilla en personajes de TV como Platos combinados, es capaz luego de hacer otro completamente distinto en otra serie de la TVG llamada Padre Casares en la que todavía sigue y ser capaz, ya no solo de convencer si no de dejar con la boca abierta en esta película. Y no se hasta que punto muchas partes de su trabajo parece fruto de la improvisación como la escena de baile en la casa de putas pero sea o no improvisación, el tío se sale.
Miguel de Lira interpretando a Cibran también está excelente como compañero de borracheras de los dos anteriores y quizás el que salga un poco peor parado sea Karra Elejalde en su interpretación de "Bocas" pero cuya interpretación tiene mucho valor al ser no ser doblado, hablando un gallego perfecto y que sobresale tanto en la escena del pazo como en la parte final.
Es de esas películas que sabes, aunque no se leyera el libro, que los personajes van camino de su destrucción desde el mismo momento que aparecen en escena y que todos están cortados por un mismo patrón.
Pero hay dos momentos que le restan puntos. Uno es la escena de los espejos donde aparecen sus cuerpos deformados, que aunque funciona como metáfora de como están ellos tanto a nivel físico como psíquico, creo que está demasiado estirada. El otro es el final que lo encontré muy precipitado y cortante.
jesus
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