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Voto de Antonio:
10
Comedia Tras ser pillado in fraganti en una situación escandalosa unos días antes de su reelección, el presidente de los Estados Unidos decide inventarse un conflicto que desvíe la atención de la prensa de su affaire. Uno de sus consejeros se pone en contacto con un productor de Hollywood para crear una cortina de humo: una guerra en Albania a la que el presidente pueda poner fin heroicamente ante las cámaras de televisión. (FILMAFFINITY)
25 de febrero de 2006
9 de 25 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tanto me impresionó esta película que me basé en ella para escribir mi novela "La Isla Suspendida" (Azagra le dedicó una viñeta en EL JUEVES, Montero Glez la defendió en Telemadrid, pero como fue una edición personal y provincial, la prensa local -en defensa propia- la ninguneó con tanta habilidad que no creo haber vendido más de 50 ejemplares). Mi novela está llena de referencias, a menudo literales, a Wag the Dog. Pero basta de hablar de mi novela. "Cortina de humo" es, si nos damos cuenta, un "lapsus calami" del SISTEMA, porque nos descubre como funcionan en realidad los medios de comunicación. Cómo se puede manipular -hasta la náusea- a la opinión pública. Una vez visionada -y comprendida- es imposible volver a un telediario sin una sonrisa irónica... (en realidad, resulta estúpido volver a ver un telediario, o volver a leer un periódico. Yo no he vuelto a hacerlo, y eso que era de dos diarios. Dos periódicos, ojo). Está llena de momentos geniales y el duelo dramático entre Dustin Hoffman y Robert de Niro supera, a mi modo de ver, cualquier otro conocido. Reconozco que el papelón de De Niro llegó a obsesionarme tanto que le imité durante algún tiempo en su desaliño indumentario, su pachorra y hasta su modo de andar. Demuestra que, cuando realmente se tiene el poder, la imagen pública importa un pimiento. Eso que se lo apliquen los metrosexuales y demás patéticos superficiales. La instrumentalización comercial que hacen con los zapatos, genial también. Y la idea de que la realidad puede "representarse" exactamente igual que una película... ¿Qué decir? Levanta el vello el momento en el que el presidente de los USA (Clinton), mientras escoge el color de un gatito digital que aparecerá en un vídeo falsificado, moviliza la Sexta Flota... Todo está en su lugar y el cásting es impresionante, incluído el extraño papel del cantautor de country Willie Nelson que, francamente, yo creo que ni se enteró de lo que estaba haciendo (y eso es lo mejor que cabe decir). Otra escena genial, cuando una niña "llora" de emoción y el personaje que representa Dustin Hoffman, visiblemente emocionado, explica que se le iba a aplicar un colirio para fingir las lágrimas, pero que "no hizo falta". O cuando reúne a todas las taquimecas de la Casa Blanca y, tras soltarles un discurso sentimentaloide y patriotero, salen todas llorando a moco tendido... La película tiene una estructura y un "timing" perfecto y está llena de detalles insospechados. Apasionante. Reveladora. PERFECTA!
Antonio
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