Cadena perpetua

Oda a la vida y al buen cine.
Película que va increscendo hasta llegar a un final sublime y épico.
De la mano de hasta aquel momento desconocido, Frank Darabont vemos como nos llega ese mensaje de esperanza, de ilusión, de que hasta las tormentas más impresionantes acaban por escampar dejandonos atónitos y con una sonrisa de felicidad interior perenne en nuestra cara.
Resaltar los mejores papeles de un Morgan Freeman entrañable y de un Tim Robbins simplemente sublime.

Sin duda alguna una de las mejores películas de su género, si no la mejor. Respecto a premios, sólo fue avalada por casi una decena de nominaciones en el año 1994. En cambio, fue premiada por cada uno de los espectadores que se deleitaron contemplando la obra maestra a la que me refiero.

La historia comienza cuando un joven banquero (Andy Dufresne, Tim Robbins) es encarcelado y condenado a cadena perpetua por el supuesto asesinato de su esposa y su amante. Obligado a sufrir injustamente el peor castigo de la justicia, la pérdida de la libertad, comienza un nuevo tipo de vida tras las rejas que no tiene nada que ver con lo que ha vivido hasta ese momento. Allí, conocerás a un hombre de color (Ellis Boyd “Red” Redding, Morgan Freeman) que terminará por convertirse en su mejor amigo. Poco a poco Andy irá saboreando la crueldad de la cárcel a la vez que descubre los pequeños placeres de la vida, aquellos que, cuando uno vive distante de la esencia humana, termina por olvidar.

De mí, sólo pueden salir elogios y halagos para este largometraje dirigido por Frank Darabont y basado en un relato de Stephen King. La actuación de ambos protagonistas es tan impecable y sublime que cuesta creer que anteriormente no hubieran vivido esa situación. Bordan sus roles. Nos brindan todo tipo de miradas, sensaciones, situaciones y conversaciones que nos atrapan poco a poco hasta culminar en un final que nos definirá visualmente lo que siente cualquier ser al dejar la jaula en la que ha sido enjaulado durante años.

Como he comentado al comenzar la crítica, esta película no será recordada por sus 9 nominaciones – 2 al Globos de Oro y 7 al Oscar- sino por los valores que describe y transmite. Idealiza y encarna la pura amistad entre dos personas que lo han perdido todo y dejan su vida a merced de su ingenio. La razón de no ser premiada hay que buscarla en Forrest Gump, la cual arrasó con los premios. Pocos que imaginaban que Cadena Perpetua, un filme desconocido y sin ser liderado por estrellas del momento, pudiera causar tanta expectación como causó. Sinceramente, esa ceremonia de los Oscar fue la típica en la que las estatuillas deberían haberse compartido por igual.

La magnífica fotografía (Roger Deakins) acompañada del gran Thomas Newman como compositor musical, magnifica aún más cada momento narrado y vivido en la película. Es de esos largometrajes que transporta al espectador a la época en sí, y deja una sensación inolvidable, sutil y conmovedora.

Inmejorable, esta es la palabra para definir esta película. Es impresionante el desarrollo de la historia, la voz en of del narrador, (un acierto el ser una historia contada en tercera persona por el compañero de penas del protagonista), ciertamente acertada y muy elocuente a la par que bastante útil para llevar al espectador al terreno que quiere en cada momento. Suspense y alerta durante todo el film. Lo mejor es el final: ¡Increible!, que pedazo de historia y la sorpresa que se lleva el espectador, cuando cuenta el desenlace final de la misma. Brillante adaptación del libro de Stephen King con un guión y un reparto completísimo. Para tenerla en casa y ver entera cuando la pasan por tv. Película de culto.

Sabía que Cadena Perpetua estaba basada en un relato de Stephen King, uno de mis escritores favoritos, pero no esperaba gran cosa, salvo alguna excepción los relatos y las novelas de King no han sido llevadas al cine con acierto. Así que me he llevado una sorpresa enorme.

Interpretada espléndidamente por dos buenos actores, Tim Robbins, que sabe hacer de bueno tan bien como de malo, y el siempre correcto Morgan Freeman; y dirigida magníficamente por Frank Darabont, que parece que ha encontrado la forma de llevar los relatos de este carismático escritor al cine (La milla verde,La niebla).

Cómo explicar lo que esta película es para mi.... Comencemos desde el principio... Cuando leí la novela de Stephen King, bueno, mejor dicho el relato corto, que es así como lo presenta....
Me fascinó, me encantó...
Cuando anunciaron la película, no pude verla porque tenía 15 años y no me podía permitir el lujo en ir al cine... ya sabéis, la paga no da para tanto...
Así que pasó un par de años hasta que la pude ver. El miedo principal que tenía es que las películas nunca son mejores que los libros, pero descubrí la mejor adaptación cinematográfica que nunca he visto. Ya sea por el papel de Robbins o por el maravilloso Morgan "Red" Freeman...
Da igual... es maravillosa desde principio a fin... los actores, el elenco en conjunto, la ambientación... la historia.... Lo tiene todo.
La he visto como 20 veces... y lloro en todas.. pero porque es hermosa.
Esa es la palabra, simplemente hermosa.