Lo contrario al amor

Como gran defensor que soy del cine español, no hay película que se precie que no deje de ver, pero hay veces en que a uno se le pasa por la cabeza, al final tener que seleccionar para no llevarse tamañas decepciones y chascos como el que nos ocupa, esta comedia romanticona, dirigida por el debutante VICENTE VILLANUEVA.
LO CONTRARIO AL AMOR, es eso mismamente lo contrario que debe ser una buena historia sobre encuentros y desencuentros amorosos, todos los actores sin excepción están desubicados y perdidos totalmente en unos roles bastante bochornosos, sobre todo en el caso de los dos amigos bomberos del protagonista y su pseudo relación gay, de vergüenza ajena total como esta planteada.
Nos importa tres pimientos sinceramente lo que les pasa a los dos protagonistas y estas deseando que termine para ponerte a hacer algo mas interesante y mas productivo que ver este subproducto de tan dudosa calidad.

Venga, va. Ya he visto la peli.

No me van las comedias románticas. Y menos españolas. Pero bueno...

Villanueva ha creado una rom com hollywoodiense made in Spain. Es la clase de peli que en EEUU hubieran interpretado Gerald Butler y Katherine Heigl. A ratos peca de familiar, poco tosca y grosea, bastante soft y agradable en general (eh, la ha distribuido Disney, amigos).

Supongo que es un cambio de aires respecto al cine de humor nacional típico.

Pero a mí este rollo no me va, la verdad.

NOTA: Las subtramas televisivas y bomberiles están mal cerradas.

Hay películas que si no se hubiesen filmado nunca, no pasaría nada. Es el caso de esta "Lo contrario al amor", una cinta que no es que la ves y te quedas igual, sino que sales con ganas de ahostiar al director y a determinados actores.

Nada más empezar la peli me pongo en guardia: la produce Antena 3, sinónimo de peligro.

Lo único rescatable de la peli es la actuación de Adriana Ugarte, una chica que lo hace ciertamente bien. El resto de actores, como era de esperar, para matarlos. Hugo Silva ya ha dado suficientes muestras de su nulo potencial interpretativo en "Los Hombres de Paco", y nunca pasará de ser un guaperas bajabragas. El resto de actores, incluida la estimable Kiti Manver, están para decorar.

En definitiva, una cinta cargada de topicazos digna de figurar en la videoteca personal de los actores, director y familiares cercanos, pero poco más.

Menos mal que la ví de reestreno; pienso en la gente que habrá pagado 8 o 10 euros por ver esta bazofia.

Cuando vi el trailer creía que sería otro 'Fuga de cerebros', o otra 'Tensión sexual no resuelta', y si bien no es tan mala como las anteriores, la cosa acaba en una mezcla de géneros sin ningún sentido, ni gracia.

La cinta es a veces un drama romántico sobre una relación de pareja bastante realista, en parte por la actuación de Adriana Ugarte, que está perfecta, de Hugo Silva mejor ni hablar, ya que no hace falta despellejarle de nuevo. Pero las subtramas presuntamente graciosas, sobre todo la de los dos amigos del protagonista, o la de la hermana (juguete roto de la tv que acaba trabajando en un programa de teletimos). Todas esta mezcla de género acaban lastrando a la peli, que tenía una buena base, pero que ha sido mal rellenada.

Lo mejor: Adriana Ugarte, y que intenta no ser otra comedia de mal gusto.
Lo peor: La subtramas, todas horrorosas.

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Es una película que puede encajar en el género de comedia romántica al que nos tiene tan acostumbrados el cine americano. Es un género que normalmente no me gusta pero que muy de vez en cuando lo veo, previamente mentalizada para ello.
Por eso esta película me resultó entretenida porque tampoco pretende nada más que eso. Con algunas situaciones que nos pueden resultar familiares y nos sacan al menos una sonrisa. Destacando sobre todo la actuación de sus dos protagonistas Adriana Ugarte y Hugo Silva al cual agradezco haya dejado de mostrar sus abdominales que tanto lució en la serie Los hombres de Paco para podernos centrar en su interpretación. Papel que ha dejado a sus otros 2 compañeros de reparto que de momento no aspiran a nada más que a lucir cuerpos, por otro lado espléndidos.