Haz click aquí para copiar la URL

12 años de esclavitud

Drama Basada en un hecho real ocurrido en 1850, narra la historia de Solomon Northup, un culto músico negro que vivía con su familia en Nueva York. Tras tomar una copa con dos hombres, Solomon descubre que ha sido drogado y secuestrado para ser vendido como esclavo en una plantación de Louisiana. Solomon contempla cómo todos a su alrededor sucumben a la violencia y a la desesperación. Pero él decide no rendirse y esperar a que llegue el ... [+]
<< 1 3 4 5 10 62 >>
Críticas 310
Críticas ordenadas por utilidad
12 de diciembre de 2013
46 de 80 usuarios han encontrado esta crítica útil
No aporta nada nuevo o diferente a la recordada serie RAÍCES... Intenta tocar la sensibilidad sensible de un espectador sensiblero. Todo en ella está calculado para producir el efecto que consigue pero al perderse al espontaneidad los objetivos son fallidos. Ya he visto que la puntuación es alta y me parece lógico porque las grandes productoras no desaprovechan la oportunidad de vendernos el producto de siempre. El malo malísimo y el bueno mejor, y si es negro y esclavo, no digamos. A ver si empezamos a "DESPABILAR"
Bueno pues ya sabes lo que hay, ahora a enfrentarse a ella a lagrimear o esbozar un sonrisa por los trucos empleados para conectar con un público ya entregado por el sufrimiento del pobrecito negro... En fin...
Mi puntuación es muy baja porque me disgustan las manipulaciones manifiestamente descaradas. 3
LEUGIM
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
14 de diciembre de 2013
17 de 22 usuarios han encontrado esta crítica útil
Cruelmente realista. Así es como se reflejan los hechos en el tercer largo de Steve McQueen (Shame, 2011), el cual vuelve a ofrecer una obra magnífica, aunque creo que personalmente debería haberse codeado menos con la industria, ya que se nota que no nos encontramos ante una cinta 100% pura del director británico como en las anteriores. Simplemente hay que ver la aglutinación de rostros conocidos o la propia banda sonora compuesta por Hans Zimmer para darnos cuenta de ello. Pero no nos preocupemos, porque el propio McQueen se ha encargado de que esa esencia “indie” prevalezca aún, llevando a cabo y rabo una historia muy bien contada, con momentos dignos para la memoria y un sabor agridulce, de esos que le suelen gustar tanto a él como al espectador.

Año 1841, Solomon Northup (Chiwetel Ejiofor) es un negro libre que vive con su esposa e hijos en Nueva York, siendo un reputado músico violinista que toca para la alta sociedad. Todo va bien hasta que un par de hombres le ofrecen una suculenta oferta de trabajo en la que aparte de estar muy bien remunerada, deberá desplazarse a Washington. Allí es engañado, desplazado de un lugar a otro del país, pasando por varios dueños en una odisea de nada más y nada menos que de doce años.

Nos encontramos con una historia seccionada en varios capítulos si lo pensamos bien. El motivo por el cual yo lo percibo así es porque cada “capítulo” de la vida de Solomon que vamos viendo a medida que la cinta va transcurriendo, va topándose con una serie de personajes muy distintos pero que tienen su razón de ser en la historia. Véase por ejemplo el personaje de Benedict Cumberbatch (Star Trek: En la oscuridad, 2013), forzado por las circunstancias de su tiempo a aceptar las leyes esclavistas y la trata de esclavos en su plantación. Un buen hombre (a mi modo de ver) forzado por los tiempos en los que vive a hacer cosas que no desea. Quizás la palabra más adecuada es: un hombre con conciencia.

No obstante, esto es lo que menos abundaba, siendo como es evidente, algo normal y totalmente aceptado que uno con los esclavos podía hacer lo que le pareciera. Es aquí donde entran Paul Dano (Prisioneros, 2013) y Michael Fassbender (Prometheus, 2012). Hombres sin alma, sin una prospección de futuro. Demonios que pagan sus penas con los negros que adquieren y que para desahogarse de sus malas vidas torturan hasta la muerte sin compasión, sin remordimiento. Sin importarles. No hay conciencia. Y si la hay, son plenamente conscientes que ya es tarde para poder redimirse de todos los pecados cometidos.

No obstante a Steve McQueen le gusta que el espectador se quede con los pequeños detalles, aquellos que pese a ser pocos, son los que más calan en la retina. Escenas englobadas dentro de la normalidad de su trama que recalcan y ahondan en la herida de esa sociedad norteamericana dividida en tiempos en los que la esclavitud empezaba a no ser vista con buenos ojos, a ser cuestionada por los propios ciudadanos llevándolos al principio de un conflicto que perduraría durante el siguiente siglo.

Para hacernos una idea, 12 años de esclavitud puede ser perfectamente ese embrión en fase de gestación que acabaría eclosionando con las ya personalidades conocidas como son Martin Luther King o el propio Kennedy, hasta llegar al presidente Obama.

Pienso que ha sido una historia que hay que ver y entender en su contexto. Es un relato digno de ser visto y que el propio McQueen ha sabido contarnos de una forma impecable, sabiendo que su estilo es el de hacernos pensar, cuestionándonos a nosotros mismos. Lo ha conseguido de nuevo.
SCuenca
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
18 de enero de 2014
16 de 20 usuarios han encontrado esta crítica útil
Acudo al cine con gran interés y salgo con una decepción más que notable. Esperaba bastante más de la psique de los protagonistas, que me llevaran a sensaciones menos obvias que el mero horror por determinadas prácticas. El único rol que me despertó algo de interés es el desempeñado por la actriz Sarah Paulson, esposa del amo de la plantación, encarnado por Fassbender. Mucho se comenta sobre la actuación de este último, a mí me parece que se aprovecha de la mediocridad reinante, pero es cierto que dentro de que sobreactúa en alguna ocasión, es de lo mejor del film.

Por lo demás la película me pareció poco rica en matices, lenta y deslabazada en numerosas escenas. Me causó bastante sorpresa que se trate una historia que dura doce años, y que en ningún momento tengamos la noción de que pasa efectivamente el tiempo. Los recursos en este sentido también han brillado por su ausencia.

Un nuevo bluff.
Francie
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
27 de diciembre de 2013
19 de 27 usuarios han encontrado esta crítica útil
No lo sé, pero a mi me pareció una película plana, sin nada nuevo que aportar y a años luz de otras películas del género que utilizan el gancho xenófobo como reclamo, como, por ejemplo, "El color púrpura" o las últimas creaciones de Tarantino como Django . Se utiliza en vano el reclamo mediático de Brad Pitt (casi desapercibido en el film) y la interpretación del protagonista, al que desconocía, me parece sobreactuada. Siento discrepar con casi todos pero vi en la sala una historia previsible y exenta de originalidad, de lánguido final feliz, muy navideño y apropiado en estas fechas
rafa granada
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
5 de marzo de 2014
16 de 22 usuarios han encontrado esta crítica útil
Epopeya de la crueldad. Muestrario de atrocidades.
Imponente forma y apabullante rotundidad para denunciar los espantosos hechos que acaecieron en USA durante la época esclavista.
El protagonista pasa de la libertad en Nueva York al secuestro en Washington y al temible cautiverio en Nueva Orleans. Una vez que llega a la zona esclavista sureña, el espectador asiste atónito y estupefacto a la galería de seres enfermos, abyectos y abominables que desfilan ante la pantalla; nos "obsequian" un suma y sigue de torturas, humillaciones, violaciones y asesinatos en todas sus formas y bajezas. Este es el meollo de la historia y lo que provoca que se quede en la más absoluta mediocridad, no se salva ni por los bellos planos, la hermosa fotografía o la necesaria banda sonora; todo es postergado por la exhibición de la maldad, se regodean/recrean en lo más repugnante de la condición humana y rechazan profundizar, informar, descubrir o iluminar, nada de eso, aquí solo se confirma lo más obvio y trillado, lo que ya se sabía y se había visto en infinidad de ocasiones; es, en fin, una de esas películas en las que prima el espectáculo del horror, en las que se utiliza el "basado en hechos reales", el que sean hechos históricos ciertos, para impactar, escandalizar y remover al espectador, lo que supone una táctica/añagaza espuria (un golpe bajo), una falta de ética artística y un recurso burdo consistente en ir a lo más fácil y renunciar a lo más ambiguo, complicado o peliagudo.
Cuando el mal es tan absoluto, enfermo e "irreal" (se intenta, levemente, hacerlo más creíble a través del primer "amo", un personaje más contradictorio -aparentemente más humano, pero hipócrita y cómplice finalmente- que queda relegado por el imposible e histérico personaje interpretado por Dano -la degeneración y la vileza en su máximo apogeo-, y que la narración abandona rápidamente para fijarse en otros más morbosos y brutos), no se aprende nada, está fuera de uno, no te incumbe, sabes que no tienes nada que ver con eso y estás a salvo; lo interesante, valiente y difícil es tratar que ese gran mal (la esclavitud o lo que sea) sea presentado de forma verosímil y humana, que se pueda entender, que obedezca a unos intereses reconocibles y no solamente al desahogo de gente enferma. En esta película te alejan del mal, lo hacen épico e inaccesible, lo caricaturizan y deforman; es, en realidad, un modo de negarlo (cuanto más se retuerce, pierde más peso y se transforma en algo abstracto, en la repetición rutinaria de una idea preconcebida y simplificadora), lo deshumanizan y lo reducen a un tópico cutre; lo arriesgado y honesto es acercarlo para que se pueda entender, para que te cambie o cuestione, para que no salgas del cine pensando que tú no harías como ellos, que tú no tienes nada que ver con eso. De esta forma, se niega la participación activa del espectador, lo relegan a un triste segundo plano, a una actitud pasiva, la de "voyeur" morboso y espantado. Lo valioso y verdaderamente enriquecedor se produce cuando puedes llegar a pensar que tú, quizás, en unas circunstancias parecidas podrías llegar a hacer lo mismo, cuando te informan o contextualizan un hecho, cuando te lo presentan desde diferentes puntos de vista (social, económico, familiar, legal, filosófico, histórico...) o cuando profundizan en las psicologías, tipos de relaciones, modos de vida o costumbres.
Película fallida, demagoga y oportunista que solo se dignifica por el poder formal, por la indudable calidad y fuerza de lo puramente audiovisual, por la elegancia, frialdad y belleza de la mirada en algunos momentos, y por no caer de bruces en el melodrama más grosero (hubiera sido demasiado).
Ferdydurke
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 3 4 5 10 62 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here

    Últimas películas visitadas
    Caravana de paz
    1950
    John Ford
    7,1
    (2.291)
    arrow