Algo en común

Esta película de Zach Braff me habría parecido muy interesante si no fuese por esa constante insistencia en querer hacer de cada escena la mejor historia de amor del cine mundial. Son tan pretenciosos el guión y la realización de este largometraje que, por momentos, dan ganas de gritar "esto no te lo crees ni tú, yupi de mierda".

Que conste que estamos ante una magistral interpretación de la irregular Natalie Portman, que le da mucha fuerza y verosimilitud a su personaje, verosimilitud de la que, por otra parte, carece la historia que narra el señor Braff.

En definitiva, "Algo en común" sería una notable película si no fuera por la necesidad innecesaria que tiene su autor de buscar una lagrimilla sentimental en el espectador en cada escena, casi en cada plano, y por intentar vendernos durante 90 minutos que un chico que no tiene nada, ni proyectos ni perspectivas de futuro (y que cuando acaba la peli sigue sin tenerlos) diga en el tramo final, para rematar, que la chica que ha conocido hace 4 días le ha cambiado la vida. Esto no lo he visto ni en los cuentos de Disney.

Pegarme un tiro, salir a la calle desnudo, correr por el barrio mas chungo de mi ciudad gritando, que me torturen...

Son el tipo de cosas que preferiría hacer antes que tragarme esta basura de nuevo

Pero, a ver, ¿estamos tontos o que? ¿De que va esta especie de mierda? Es horrible ver al tontainas de Zach en la pantalla, pero verlo actuar su propia película. ¿en que cabeza cabe? ¿A quién ha chantajeado para financiar este bodrio? En serio, y lo peor es que vende, engancha y a la gente le encanta. Y todo gracias a la formulita mágica.

Pirados con pastillas + conversaciones sobre nada, que no hablan de nada y tienen que ver con nada pero suenan super profundas y mágicas, maravillosas y entrañables pero que como ya he dicho esconden la mas profunda NADA + situaciones estúpidas, como gente que vive en barcos en mitad de una mina a cielo abierto + Protagonista con cara de capullo + Intento de originalidad + Banda sonora elegida por un chaval de 15 años

Y el tio se queda tan pancho... En fín, no le pongo un 1 porque sale Natalie Portman y un tal Method Man cuyo nombre me hizo gracia.

Solo dos cosas más, Natalie Portman no te vendas más y Zach Braff, sigue tomando pastillitas...

Película dispersa, impredecible, irregular y difícil de calificar. Debo decir que estoy altamente saturado del abuso de personajes frikis y momentos frikis en tantos filmes de hoy en día. La abundancia de éstos me provoca un rápido rechazo, y eso hizo que estuviera a punto de abandonar la historia. Para peor hay algún que otro amago de incursionar en el humor bizarro y ramplón de productos como "Loco por Mary", pero afortunadamente queda en amagos simplemente. Promediando la película y luego de algún que otro acierto desperdigado, de pronto nos encontramos con un vuelco románticón y escuchando frases muuuy cursis y fuera de contexto con el caos que hemos venido siguiendo. Al final es donde se pueden ver las mejores escenas, aunque hay que señalar que están casi monopolizadas por la excelente Natalie Portman, que consigue sacar brillo a cualquier material. En cuanto a Zach Braff, después de ver esta película, pienso que como director no debe perder la esperanza de mejorar, pero como actor pareciera que no tiene otro recurso de expresión que agrandar sus órbitas oculares.

Animado por la alta puntuación media, y por las críticas valoradas "de utilidad", me he tragado un pestiño que si bien tiene algún momento de interés (la tan comentada escena de los gritos en el barranco y escasamente alguna otra más), su tremenda lentitud en no contarnos nada que haga avanzar la historia, lo irreal del comportamiento de unos personajes inverosímiles (y sobre todo su nulo desarrollo), y el casposo final felíz tan forzado, aburre y asquea incluso al más entusiasta.
El señor Braff, genial en Scrubs, aquí se muestra de un soseras que espanta, y ni siquiera el buen hacer de la Portman logran que una historia que intenta cubrír demasiados frentes levante el vuelo más que en contadísimas ocasiones, y de una forma intermitente y demasiado puntual.
Recomendable como somnífero, y como muestra de que el éxito en la técnica "Juan Palomo" no está al alcance de cualquiera.

Diálogos y momenyos cómicos que me han hecho soltar unas cuantas carcajadas. Sientes una empatía especial con el protagonista al ver su curiosa manera de entender la vida: es como si andase por la vida asumiendo que hay momentos agrios y momentos dulces, y no se sorprende cuando éstos llegan.

Creo que es una peli super optimista y ens enseña a tomárselo todo con humor. El buen humor ya lo pone la banda sonora, me ha parecido muy acertada!!

Cierto que el final podría haber sido un pelín más original, o al menos haberlo hecho con una escena no tan vista.