Este chico es un demonio

Comercial y mediocre payasada de la que nadie sale bien librado (ni siquiera el débil y tierno Ben, interpretado por John Ritter). Para semejante esperpento sólo queda descerebrarse y reír (es decir, dejar de pensar en Cine y volverse un espectador promedio)...entonces, ¡oh, prodigio!, puede uno emitir sonoras carcajadas y deleitarse con humor casero. Pésima, obviamente, pero en medio de tanta violencia y brutalidad termina siendo una agradable elcción para ver en familia.

¿Recuerdan esa escena de “El cabo del miedo” en la que el desagradable personaje interpretado por Robert De Niro se reía ostentosamente de este film?

Pues es un buen rasero para medir la película.

Está hecha para gustar a trastornados piscópatas.
Es insoportable.
Es enervante.
Es como una versión hardcore de Sin-Chan mezclado con "Sólo en casa".
Es infumable, intragable, provoca arcadas...

Cine infantil, del malo, en definitiva.

(Pobres críos)

Al principio era muy gracioso ver al típico crío que su objetivo es hacer gamberradas y nada más. Pero después de unas cuantas películas de lo mismo, en mi opinión, termina cansando. La verdad es que si lo piensas bien no tiene tanta gracia, es la típica comedia facilona que no tiene ni pies ni cabeza. En fin, que ya cansa, y mucho.