Jay y Bob el silencioso: El reboot

Apenas recuerdo nada de la película original de 2001, solamente algunas piezas borrosas y la presencia de algunos actores. Pues bien, ayer me puse a ver Jay y Bob el silencioso: El reboot. La verdad es que Kevin Smith se sabe reír de sí mismo y/o de su universo, y si no es así, lo ha hecho francamente bien, pues ha sacado una tontada de film excelente. Su guión dice verdades como puños sobre la industria de Hollywood, con la creación de reboots, remakes, secuelas y precuelas, aquí lo pinta todo con un toque bastante cómico en general y algo jocoso. Antes de ver dicha cinta, quizá se debería revisionar, si uno quiere, su anterior filmografía, ya que bebe de toda ella, metiendo muchos personajes de aquellas películas. Ya sea a modo de secundarios o a modo de cameos, simpáticos cameos que consiguen sacarte alguna sonrisa por el camino. No me escondo al decir que Smith (versión director), con el reboot de sus icónicos personajes de Jay y Bob el Silencioso, ha conseguido hacerme disfrutar durante más de cien minutos. Tiene las risas garantizadas. Me hubiera gustado verla en la pantalla grande, en una sala de cine como la original, pero bueno, no se puede tener todo. Muchos compañeros de profesión y amiguitos de Smith de otras películas que han vuelto para, esperemos que no, dar punto final a estos personajes que nacieron de su imaginación hace más de 25 años. Además, sabe bien cómo romper la cuarta pared en algún momento de la función. El señor Kevin ha vuelto a meter a su hija Harley Quinn Smith, que no será una gran profesional, pero se sabe defender bastante bien con el guión que se le ha dado con sus momentos lacrimógenos incluidos y no lo hace nada mal. Por mi parte, en mi opinión, me he topado con un notable film que, no pasará a la historia del cine, pero que te hace pasar unos minutos de los más divertidos y entretenidos. Smith se aferra a una tremenda nostalgia a un pasado que no volverá, pero que seguirá presente en todas sus películas y en esta que ahora nos ocupa. Mi nota final es de 8/10

También podría haber titulado esta crítica: De cuando un director hace lo que le sale de las pelotas, porque en realidad lo que quiere es  rodar una peli con sus colegas de toda la vida y llevarse algo de pasta si puede en el intento...

Al ver esta peli, la misma lástima me ha dado Kevin Smith que el bueno de Martin con su última y alabada! The Irish man (El geriátrico Irlandés).
O por un lado te faltan ideas y le tomas el pelo al público haciéndolo cómplice(en alguna escena abiertamente te lo hacen saber) o saboteas tú propia película como en el caso de El Irlandés, porque te has empeñado, por tus cojones, que tus colegas de toda la vida lo hagan todo en tu puta película.
Pero! y lo bien que se lo habrán pasado tomando Macallan 18 en el backstage y rememorando los viejos tiempos! Eh! Casi nada!
Y si encima los críticos te lamen el culo igual, pues perfecto.
El problema es que Kevin no es Martin, los críticos si son críticos y a excepción de algún fan fumeta, nadie va a lamerle nada.
Pero eh! Y lo bien que se lo habrán pasado bebiendo gintonics y fumando droga en el backstage, rememorando los viejos tiempos! Eh!

En fin, que si no has visto Mallrats o el origen que llevo a degenerar en esto, mejor ves al origen.
Y si ya lo conoces y quieres ver esto, pues liate uno, ponte en modo actitud positiva con algún colega y déjate llevar.
O si no simplemente mira otra película que hay mucho que ver y la nostalgia mata.

Oh yeah baby, squeeze the monkey! Yes squeeze it! Y deja a los pobres mortales que sigan gastando su tiempo o dinero en esta bazofia. Sabes nena, soy director de Hollywood, puedo hacer lo que me de la puta gana: )
Oh baby, yes I do!