Más allá del amor

Es algo basurilla, pero era la basurilla que yo quería ver.

· Cosas buenas: está entre el cringe y lo bonito, una línea delgada, pero no da demasiada demasiada vergüenza ajena. Chillo con algunos diálogos y algunos planos. Me gusta el dúo protagonista, se compenetran bien. Y lo dicho, no tiene malos diálogos, dentro de lo que estamos, claro.

· Cosas malas: es algo incongruente que en 20 min de película la chica ya se suelte tanto cuando en 4 años no había hablado con nadie, eso y otras cosas. Los clichés, huele a ellos de lejos. El guion es típico, nada nuevo. El final no me convenció demasiado.

Objetivamente, sé que no es una buena película. Pero me ha gustado dentro de lo que cabe. Si quieres ver algo del estilo romántico que nunca se haya hecho, no es tu película, pero si quieres ver una medio buena película de romance plagada de clichés, esta es tu cinta.

Me parece un remake muy superior al original de 1981, de Franco Zeffirelli. Su pareja protagonista tiene mucha química y los grandes secundarios ponen seriedad y oficio a una película sin pretensiones y que resulta de lo más entretenida. La banda sonora contiene auténticos 'temazos' y es un no parar, en una estupenda gran selección de canciones. Se disfruta desde el primer momento y en época de crisis y miseria tan complicada como la nuestra, siempre es reconfortante ver gente guapa y rica que disfrutan de las cosas maravillosas que tiene la vida; y que la mayoría no podremos acercarnos ni en sueños, por eso recomiendo la película, porque en tiempos de pesadilla es mejor soñar de vez en cuando para alejarnos de la cruda realidad.

He visto... Endless Love (Netflix)...
https://www.filmaffinity.com/es/film953800.html

Un 5. Digamos que, con las sensaciones que me ha aportado, no la recomendaría, pero tampoco diría que no se viera, aunque ha sido un tanto sosa.

De hecho, me ha hecho sentir que la quinceañera romántica que llevo dentro a empezado a desaparecer. Y sería una pena, porque me proporciona muy buenos momentos. De hecho, me voy a ver alguna de mis pelis románticas como prueba del algodón.

Desde hace tiempo estoy buscando una película que me transporte, añoro sentir todo el amor y drama que viven los personajes a lo largo de la historia; sin embargo, esta fue otra decepción que añadir a mi lista. Más Allá del Amor se encuentra llena de clichés y situaciones esperadas e incómodas, creo que prefiero retomar algunas de las adaptaciones de Nicholas Sparks.

No sé cómo será la novela en que se basan esta película y la anterior de Franco Zefirelli, pero Más allá del amor, versión 2014 de Shana Feste, es como un calco de la mítica historia de Romeo y Julieta (o Tristán e Isolda, vaya), pero con menos tragedia. No nos engañemos. No es lo mismo Verona en el Renacimiento y dos familias enfrentadas a muerte que dos adolescentes americanos con padres pijoteros. El signo de los tiempos, qué quieren.
Lo más grave aquí es que el ritmo es algo plomizo en algunos tramos, y especialmente en todo el segmento de la casa del lago, cuando entra en escena la familia de Jade, con su padre a la cabeza (un Bruce Greenwood con permanente cara de cabreo) intentando separar a los dos amantes. Ahí es donde Feste pierde un poco las riendas, cosa extraña teniendo en cuenta que tampoco eran las riendas de un purasangre desbocado, sino más bien de un dócil pony. Más allá del amor es un romance inofensivo pensado sobre todo para adolescentes, lleno de tópicos, de sentimentalismo, de mucho muchísimo azúcar y con una pareja de guapos protagonistas que hacen lo que pueden con sus pírricos personajes y conflictos (Gabriella Wilde no llega a emocionar demasiado, mientras que Alex Pettyfer ha tenido interpretaciones mejores, para qué engañarnos). Sin embargo, es lo que es, no engaña a nadie y da más o menos lo que promete, por lo que puede ser disfrutada sin problemas por espectadores sin muchos prejuicios y con el suficiente tiempo libre.
Si quieren algo (un poco más) sesudo en la misma línea, ahí están Bajo la misma estrella o El diario de Noah y Un paseo para recordar, que siempre han sido lo más digerible que ha dado la bandera de Nicholas Sparks al cine. Más allá del amor es absolutamente deudora de ese espíritu romántico juvenil.

Lo mejor: Da lo que promete, más o menos.
Lo peor: Es sosa, aséptica y almibarada hasta la indigestión.