De profundis

Aunque soy admirador de Miguelanxo Prado como dibujante, desde que lo descubrí en las páginas de El Jueves en los años 90, he de reconocer que la animación no es lo suyo, a juzgar por esta triste película.

Claramente influenciada por la obra de H.P. Lovecraft, la historia se hace dificil de seguir, sin diálogos ni narrador. La animación es cutre.

Esto, que sin duda hubiese sido una buena novela gráfica, no funciona como largometraje.

Solo me gustó el final, muy poético.

Mientras veía la peli, me dijeron: "parece que hayamos ido a escuchar un recital de música clasica y de paso nos han puesto imágenes." Realmente pienso lo mismo. No hay historia más que la que se puede leer en la sinopsis. En realidad, creo que esta película pretende ser una especie de "poema", pero lo que consigue es dormirte. Para mí fue como un documental que no te interesa nada y que intentas hacer lo posible por sacárle algo positivo, pero no puedes evitar que te aburra soberanamente. Para mí la música no fue suficiente para paliar la falta de diálogos; creo que no transmite. Y sí, la estética me gustó, pero no lo es todo en una película. Tiene que contarte algo y ya no me refiero a trama, tiene que transmitirte algo. Y a mí, sinceramente, no me transmitió nada.

Eso sí relaja, relaja muchísimo; demasiado.