Capitán Trueno y el Santo Grial

La verdad es que ya fuí a verla "avisado" por las críticas de lo mala que era, pero la realidad ha sido mucho peor. La película es francamente mala, los diálogos, infantiles, (si cierras los ojos parecerá una película de dibujos, de las malas), los "efectos especiales"....¡sin comentarios!, los "actores" parecen sacados de un teatrillo de colegio. En fin, poco se puede añadir a lo que ya se ha dicho...únicamente, decir que, pese a las malas críticas me aventuré a verla ¡ y fuí el único !, porque estaba en el cine yo solito....¡ que pena !

Por qué no reconocerlo, esperaba esta película desde hace años. O mejor dicho, desde hace décadas: como aficionado al cómic, éste fue el personaje que me enganchó al mundo de las viñetas, tras conocer a Mortadelo, Filemón, Zipi y Zape, Carpanta y Rompetechos. Porque luego llegó el Capitán Trueno y todo cambió radicalmente, y los tebeos se convirtieron en cómics. Algo como más adulto, más profundo, por mucha imagen reaccionaria que tuviera. Ese héroe de marcado acento e-pañó (que diría Torrente) era la quintaesencia de la reserva espiritual de occidente, que ahora parece que pocos se acuerda, como tampoco se acuerdan que su frase mítica era “Santiago y Cierra España”, en clara reminiscencia a la gloriosa reconquista de los árabes entre los siglos XIII y XV. Pero poco importaba, porque en un mundo huérfano aún de los personajes de la DC y de la Marvel, El Capitán Trueno y el Jabato (con toda su iconografía) era la créme de la créme. Por eso era muy fácil cagarla con este producto, máxime cuando los productores han apostillado que la pésima calidad del film se debe a que “el capitán trueno fue siempre un producto para niños, y la película también lo es”. Toma ya. Con lo que no ha contado el lumbreras este es que los niños que leíamos El Capitán Trueno ahora tenemos cuarentaytán y que no se nos puede tratar como a gilipollas. Pero su desfachatez, y la de su otro compinche Pau Vergara –el auténtico responsable de este desastre insalvable- es que no solo ha tratado de gilipollas al público, sino que también lo ha hecho con el equipo técnico –dejándole un papelón d aquí te espero al curtido realizador Antonio Hernández, que ya ha demostrado su capapacidad para el cine histórico de aventuras con la más que digna “Los Borgia”- y por supuesto con el equipo artístico –al que ha dejado de pagarle por todo el morro, y que no ha avisado para los actos de marketing y promoción del film…un desastre sin paliativos ni excusa-. Tendríamos que remontarnos hasta casi diez años atrás para recordar que un entonces pletórico Julio Fernández de Filmax compró los derechos de adaptación del personaje de Victor Mora. Y para el proyecto contrató nada más y nada menos que a Juan Ma Bajo Ulloa (“Alas de Mariposa”, “La madre Muerta”, “Airbag”…) pero las desavenencias entre director/guionista y productor dieron al traste con el proyecto. Posteriormente se involucró a Alejandro Toledo e incluso a Elsa Pataky, para encarnar a la princesa vikinga Sigrid de Thule. Pero tampoco funcionó el entuerto y todos se fueron descolgando. (SIGUE EN SPOILER POR FALTA DE ESPACIO)

Sin duda una de las películas más ridículas y bochornosas que se han rodado en España en los últimos treinta años. Al lado de esta sandez, mediocridades televisivas como "HISPANIA" o producciones algo más cuidadas como "LOS BORGIA" (curiosamente, también salida de las manos de Antonio Hernández) se elevan casi a la condición de obras maestras de la cinematografía histórica patria.

Pocas veces he sentido tantas ganas de salirme de la sala del cine como el pasado fin de semana, cuando tuve la desdichada idea de ir a comprobar si la película era tan mediocre como parecían anunciar su "trailer" y las primeras críticas. Y resultó que "EL CAPITÁN TRUENO" no era mediocre, sino directamente una basura de la que apenas podría salvarse el vestuario, la panoplia militar de cotas de malla, cascos y espadas (de la cachiporra de Goliath, mejor ni hablamos) y la siempre inquietante voz de Ramón Langa, que con ese careto que asusta al miedo bien podría haber sido uno de los grandes del cine español a poco que se lo hubiera propuesto.

Me bastaron 15 minutos para confirmar que esta producción debería ser arrojada al pozo del olvido de inmediato y todavía no me explico cómo me las apañé para aguantar hasta el final. ¡¡Qué horror!! ¡¡Qué ridículo!! ¡¡Qué bochorno!!

Por cierto, y a propósito de la forera "Dulce", esa que le ha dado un 9 a esta payasada y que asegura que ella y sus amigos y familias se lo pasaron "pipa" viéndola, está más claro que el agua que se trata de alguien relacionado directa o indirectamente con esta producción, pues se ha dado de alta en estos foros exclusivamente para dar su voto super-positivo y no tiene ni más críticas ni más valoraciones de películas.

Pocas cosas a comentar sobre esto...quizás la continua vergüenza ajena con la que pasas la mayor parte del tiempo, el mal cuerpo que se te queda cuando sales del cine, los caretos de la gente mientras se levantan de las butacas y el porque no esperar a que tu nene se la bajara por intenné (y borrarla inmediata mente). También me ha sorprendido la critica de "Dulce" y me ha hecho pensar que por suerte los familiares de los responsables de semejante bodrio como mínimo han ido al cine a verla.

El mayor despropósito del cine moderno español. Esta película es un magnífico ejemplo de como no hacer cine o como hacer cine del malo... personajes sin desarrollo, efectos especiales ridículos, un argumento de parodia, actores amateurs... para ponerlo en clase a los estudiantes de cine.