Infierno blanco

Interesante y estupendo melodrama, una auténtica aventura de supervivencia en la que vemos a Liam Neeson interpretando un papel diferente al que nos tiene acostumbrados. La historia es sencilla y engancha desde el principio. Además, te mantiene en tensión debido a las duras condiciones que conlleva la supervivencia al frío glacial en aquella remota y siniestra región de Alaska, donde escasean los alimentos, la bebida, el calor o incluso armas con las que poder defenderse; y lo peor de todo, los peligros a los que los supervivientes del accidente de avión deben enfrentar en esta fatídica aventura.

A destacar las actuaciones, tanto la de Frank Grillo como el tipico aguafiestas como la de Liam Neeson tomando el rol de lider del grupo, los cuales han estado brillantes.

A pesar de las críticas negativas que ha recibido esta peli, he de decir que a mi me ha dejado un buen sabor de boca, con lo cual la recomiendo. Eso sí, no esperéis un peliculón o una obra maestra, ya que está lejos de serlo, pero cumple su función: Mantenernos en tensión y sumergirnos de lleno en ese infierno blanco custodiado por enormes y salvajes lobos, lo cual crea una atmósfera muy convincente. Eso sí, la trama peca de previsible, ya que uno puede intuir qué ocurrirá en los próximos minutos.

El final que depara esta aventura es sumamente interesante y demuestra coraje y valentía, acompañado de una BSO exquisita y que pega mucho con este melodrama de supervivencia.

Como punto en contra de esta peli, considero que a los lobos se les ha dotado de mayor inteligencia de la que realmente poseen, y dejando a los humanos de tontos.

Como alternativa a esta peli, tenemos "Viven", la cual a mi personalmente me ha gustado más. Está protagonizada por el actor Ethan Hawke y por si fuera poco, está basada en hechos reales, lo cual suma. Otra alternativa y también superior a esta peli es "El Desafío" interpretada por Anthony Hopkins y Alec Baldwin.

Nota: 6,5.

Drama de supervivencia capitaneado por Liam Neeson. La cinta está basada en la novela de ficción de Ian MacKenzie Jeffers, en ella un avión cae en las nevadas montañas de Alaska y los supervivientes (trabajadores de una petrolífera) tratarán de volver a la civilización entre ventiscas, lobos y demás adversidades.

Los dramas de supervivencia situados en los inóspitos climas bajo cero han proliferado en el Séptimo Arte desde hace bastante tiempo ("El renacido" (2015), "Everest" (2015), "Bajo cero" (2006), "Ice Road" (2021), "Bajo cero: Peligro en la montaña" (2017), "El desafío" (1996), "Frozen" (2010), "Una montaña entre nosotros" (2017), "Edge of Winter" (2016), etc.) y con los protagonistas como sobrevivientes de un accidente aéreo... pues tenemos "Viven" (1993) que, sin ser una obra maestra (admito que se borró muy pronto de mi memoria), es la cinta por antonomasia en cuanto a esta temática se refiere. "Infierno blanco" rememora en muchos puntos a aquella cinta noventera al compartir propuesta... y es consciente de ello (pues la nombra sin pudor). Y también se podría decir que comparte una calidad similar en líneas globales.

Y es que "Infierno blanco" aúna acción de supervivencia y dramas personales con simplicidad, accesibilidad, sencillez e incluso ingenuidad muy básica. Los personajes son cada uno de ellos un tópico (desde el antihéroe protagonista curtido en mil batallas hasta el villano del grupo) y no se perfilan más allá de sus clichés establecidos. Mientras que las desventuras por las que atraviesan también son estándares y garabateadas. Desde luego en cuanto a su mimo en la profundización de sus personajes o en intricar los lances entre la nieve... digamos que largos como "El renacido" o "Everest" le ganan la partida a "Infierno blanco" (e incluso "Viven" aportó algo más de dimensiones u hondonadas a sus personajes y situaciones). Aun así no estamos ante un guión memo y absurdo, mantiene su coherencia interna y va progresando con un equilibro ajustado en la evolución de la tragedia.

Así que "Infierno blanco" no nos da lugar para el aburrimiento... al igual que no nos hace cavilar tras su visionado ni nos cala de forma profunda (esto no es "Salvar al soldado Ryan" (1998), "Gladiator" (2000) o "La lista de Schindler" (1993)). La cinta se arrincona con la misma rapidez con la que se consume. Pero, si bien el libreto es tan mundano como apto, la presencia de Liam Neeson con su empaque interpretativo hace que el conjunto suba un peldaño en solidez. Pues Neeson vuelve a encajar como un guante en su atormentado líder de este grupo abandonado a su suerte, su carisma innato y su cercanía irrefrenable con el espectador vuelve a hacer acto de presencia y alza una película de género corriente y esquemática. El resto del elenco cumple en sus limitados roles con naturalidad y oficio. Pero el gran aliciente junto a Neeson de la cinta es su cinematografía.

Con una fotografía enamoradora de paisajes helados y vasta naturaleza, una composición de colores estética y refinada, una definición impecable, una realización eficiente en todo momento, una oportuna labor de maquillaje y vestuario, unos efectos visuales imponentes, y una mezcla y edición de los sonidos maravillosa "Infierno blanco" se torna en una película de palomitas de cierta inmersión en su hábitat y sus huídas y caminatas. Nos olemos bastante lo que está por venir, pero lo observamos igualmente dada su hermosa percha y la complicidad de su cabeza de cartel. No cambia la historia del cine, pero como esparcimiento evasivo cumple ajustadamente. Recomendable para todo público adulto que solo busque eso (y solo indispensable a los fans de Neeson (pues esta cinta no difiere mucho (solo en el paisaje y los oficios de los personajes) de lo que nos ha regalado con "Non-Stop" (2014), "El pasajero" (2008), "Sin identidad" (2011), "Ice Road" o "Una noche para sobrevivir" (2015) y su mismo personaje de experimentado héroe de acción en circunstancias especiales o inesperadas)) o de los "survival films".

Lo mejor: Me quedo con la fotografía y el sonido.
Lo peor: Que el guión no sea capaz de aportar algo más de matices o virajes.

Quiero dejar claro desde el principio que la película me ha resultado entretenida, y eso lo valoro bastante. Ahora bien, siendo objetivo he de reconocer que se trata de un film muy olvidable. Tiene buenas intenciones porque intenta ofrecer un drama de supervivencia con tintes de cine de aventuras, y lo cierto es que falla de forma estrepitosa. Por supuesto que no todo es malo, para nada. De hecho, cuenta con algunos puntos positivos que en breve comentaremos. Si la propuesta es fallida se debe a que quiere ser algo que no es. Se cree más de lo que realmente es. En ese sentido peca de pretenciosa. Como dice el dicho (muy acertadamente), "el que mucho abarca, poco aprieta", y en mi humilde opinión, eso es lo que le pasa exactamente a Infierno blanco. Podemos hablar de lo mal filmadas que están algunas secuencias nocturnas y de esos lobos digitales que no engañan a nadie, pero la carencia más importante ya está más que mencionada. Por otra parte, hay que admitir que el visionado entretiene en todo momento y que Liam Neeson lo hace muy bien dentro de lo que cabe. Y es que sin la participación del actor norirlandés, no cabe duda de que el filme sería peor. Hay varios sustos en forma de golpes de sonido que pueden hacerte saltar del sofá, y sirven para que el espectador se mantenga en tensión constante.

La película empieza bien. Casi diría que muy bien. Eso es lo más cruel.
El planteamiento inicial parece el de una película de aventuras en la zona más inhóspita de Alaska. Las primeras escenas tras el accidente, junto al protagonista principal (Neeson) casi garantizan un buen rato de acción y entretenimiento.
Es mentira. Una muy cruel.
Te ofrecen un caramelo y luego te lo quitan y te dan un coscorrón!
Apenas unos minutos después, el entretenimiento ha desaparecido y ha sido sustituido por una historia que intenta ser muy profunda y que se queda en muy muy lenta. Las cosas pasan muy despacio y durante muchos intervalos de la película ni siquiera pasan. La acción es muy poca y las secuencias emotivas que atacan la sensibilidad del espectador demasiadas. Tan tediosa se vuelve la película que lo único por lo que te dan ganas de llorar es por toda esa acción que te habían prometido.
Mal el guionista, mal el director y pésimo el tío de los efectos. No salvo a nadie.
En definitiva, un pequeño tostón.

Me ha encantado la película. Por fin a un director de cine se le ha conmovido el alma y ha narrado la historia desde nuestra perspectiva, que es como ocurrió realmente. Yo estaba allí.