La sombra de un secuestro

"La sombra de un secuestro" relata la insulsa historia del secuestro de un conocido empresario (Robert Redford) por un tipo oscuro y amargado (Willem Dafoe), desde el punto de vista de la mujer del secuestrado (Helen Mirren) y su familia, con constantes flashbacks que nos remiten a la interacción de secuestrador y secuestrado.

La historia y todo lo que la rodea es tan aburrido y carente de interés que uno se pregunta qué pudo animar a los productores a financiar semejante castaña. Del duelo interpretativo entre Redford y Dafoe (que es lo que me animó a ver esta película), gana Dafoe por goleada.

Estupenda mezcla de drama e intriga que retrata la vida de un matrimonio aburrido y a la vez, un agobiante secuestro.
Tanto Redford como Dafoe estan geniales, pero creo que la que se merece estar a parte por su GRAN interpretación es Helen Mirren, que aporta una enorme credibilidad a su personaje.
No entiendo como la hayan dejado tan mal aquí, en FilmAffinity, con un 5,2. Yo le pongo un 7, 5, que se redondea a 8. La encuentro muy bonita.

Una película diferente. El tema abordado es común en el cine pero la manera que lo aborda el director hace que el film sea distinto. El relato lento y las muy buenas actuaciones de los actores hacen que se pase rápido las casi dos horas de duración. En fín, esta solo buena, pero el hecho de ver a Helen Mirren, Robert Redford y Williem Dafoe merece que se la vea.

Primera y hasta la fecha única película del holandés Pieter Jan Brugge, que se inspira en el secuestro, dado el título no es una sorpresa lo que va a suceder, de Gerrit Jan Heijn en su país en 1987. "La sombra de un secuestro" mezcla drama con intriga, con clara victoria de la primera pues la trama, una vez se produce el hecho detonante, el rapto de Wayne Hayes (Robert Redford), adinerado empresario de ¿Pittsburg?, no avanza mucho. Más bien se dedica a describir el impacto causado a las más allegados, incluso la personalidad del villano y la víctima, aunque sin descuidar las estrategias de la policía para resolver el caso y devolverle la libertad a Wayne.

Dicho esto, hay algo raro desde un primer momento. Por ejemplo, Wayne oculta algo, lo que es verdad. Pero hay más, el secuestrador, que es un tal Arnold (Willem Dafoe), debe tener un cómplice. Así te pasas medio metraje averiguando quién puede ser. ¿La mujer, Eileen (Helen Mirren)? ¿El hijo? ¿La nuera? No parece. ¿La hija, que está un poco alelada? Espero que no pues Melissa Sagemiller me ha parecido mona y un tanto pava. De todos modos avanzo que el desenlace te deja bastante frío. Aún así, aunque la película no tenga demasiada chicha, no llega a aburrir si bien por los pelos, tal vez, porque es corta. Además el trío protagonista es excelente.

Un tal Pieter Jan Brugge contrató a Robert Redford y a Willem Dafoe, y a un tal Justin Haythe para marcarse un guioncillo aceptable, y le salió una obra cuanto menos curiosa. Merece la pena sólo por ver a estos dos maestros de la interpretación frente a frente, que sin duda son los que salvan la película. Desde luego no es fácil hacer buen cine, eso está claro, cuando aciertas con los actores te dejas el guión de lujo, y Fermatversa...