Haz click aquí para copiar la URL

Gracias y favores

Drama Mac Sledge, un alcohólico vagabundo que fue en otros tiempos un cantante famoso, entra en la vida de una solitaria viuda, que vive con su hijo en la árida llanura de Texas. El problema es que Mac, antes de empezar una nueva vida, debe enfrentarse a un doloroso pasado. (FILMAFFINITY)
<< 1 2
Críticas 8
Críticas ordenadas por utilidad
12 de octubre de 2018
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Bruce Beresford es un director australiano que después del éxito de su película “Breaker Morant” (1980) se trasladó a Hollywood y se destacó con películas como “El Precio de la Felicidad” (1983), “El Rey David” (1985), “Crímenes del Corazón” (1986) y “Conduciendo a Miss Daisy” (1989), con la que ganó varios premios Oscar. En las décadas posteriores hasta la actualidad, no ha logrado acaparar la misma atención que tuvo en los 80, aunque ha desarrollado una fructífera carrera que abarca 50 años de ininterrumpido trabajo con más de 30 películas a su haber.

“El Precio de la Felicidad”, conocida también con el título de “Gracias y Favores”, forma parte de un grupo de películas muy de moda en la primera mitad de los 80, que junto a otras cintas como “Vaquero Urbano”(1980), “La Hija del Minero”(1981), “HonkyTonk Man”(1982), “SongWriter”(1984) y “Dulces Sueños”(1985) entre varias más, retrataron vidas de cantantes de música country o contaron sufridas historias de personajes típicamente tejanos y en su mayoría rurales, siempre acompañados por una poderosa banda sonora llena de canciones en este estilo musical tan típicamente norteamericano. En el caso de “El precio de la Felicidad”, con un guion del aclamado escritor Horton Foote, mismo guionista de “Matar a un Ruiseñor” (1962), se cuenta una historia de sacrificio donde a través de la convivencia familiar, la figura paternal, y la búsqueda de un camino espiritual, el protagonista intenta redimir las heridas de su pasado junto a una joven viuda y su pequeño hijo. Las llanuras de Texas, fotografiadas magistralmente con luz natural y sin artificios por el australiano Russell Boyd, colaborador permanente del gran director Peter Weir, sirven como el solitario y bellísimo escenario que acompaña a los personajes en la búsqueda de una nueva vida. De esta manera, es fundamental en la historia, la relación padre-hijo que surge entre el adulto y el niño, y en donde la figura del pequeño simboliza ese necesario vehículo de inocencia, redención y encuentro con un nuevo comienzo.

Si bien “El precio de la Felicidad” no tuvo un gran éxito de público, tal vez debido a su ritmo pausado y su bajo perfil, la película acaparó cinco nominaciones al Oscar y cinco nominaciones al Globo de Oro, incluyendo mejor película, dirección, actor principal, guion, y canción original, y ganando finalmente los codiciados premios para el actor Robert Duvall -quien canta sus propias canciones en la película- y para el guionista Horton Foote. La película también compitió por la Palma de Oro en el Festival de Cannes y está considerada por la crítica ochentera como una de las mejores películas de la década.

Texto: Daniel Valcarce
Daniel Valcarce
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
5 de mayo de 2020
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Pequeña película que supuso el primer y único Oscar de Robert Duvall, uno de esos excelsos actores que por sí solos justifican el visionado de un largometraje, aunque luego éste no sea gran cosa. "Gracias y favores", sin ser una maravilla, se alza por encima de la indiferencia y en cierto modo anticipa, 26 años antes, el personaje de Jeff Bridges en "Corazón rebelde", también ganador del Oscar.

Personajes perdidos, alcohol, problemas familiares, religión, música, niños parlanchines y vidas rotas prestas a una segunda oportunidad son elementos que normalmente suelen tener buena cosecha de cara a los premios. También suele ocurrir con frecuencia que los Oscar se dan a un actor o actriz cuando quizás no era su mejor actuación, pero para resarcirle de injusticias pasadas. Duvall tenía ya 53 años y ya se merecía el premio en "El Padrino" o en "Apocalypse Now". Aún así debe reconocerse que está muy bien en "Gracias y favores".

Por lo demás, buenas canciones cantadas por él mismo, tono reposado y suave y hermosa fotografía con luz natural aprovechando los paisajes texanos, pero sin las pretensiones de "Días del Cielo".
Ferdin
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
17 de abril de 2023
0 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Inicialmente la propuesta del cantante de Country alcohólico y arruinado que trata de rehacer su vida al lado de una buena mujer, joven, viuda, muy trabajadora, anabaptista y con un hijo, resulta atractiva.
Sin embargo el guión está repleto de agujeros narrativos, lo cual lastra enormemente el buen desarrollo del filme.
La música Country, que sobrevuela continuamente la historia, carece del peso que le hubiera otorgado mayor dramatismo.
Las interpretaciones resultan magníficas, dándole un aire dramático, que bien podría estar cerca del documental. A pesar del Oscar a mejor actor de Robert Duvall, su esposa en la ficción, Tess Harper, resulta magnífica con esa frialdad propia del desgarro interior, de la América ultra profunda, donde la esperanza se arrebata a golpes cada día.
p1471789
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 2
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow