From Black

Más bien por culpa de las drogas (bueno, por su culpa, siempre está la opción, el sí o el no), una madre pierde a su hijo, y recibe con incredulidad una extraña oportunidad para volver a estar con él, para que 'regrese'.

¿Sabéis esas películas que tienen una historia que podría ser buena, pero que al final resulta alargada hasta el hastío y el tedio? ¿Que sería más que buena para un corto, pero aún así hacen un largometraje repleto de minutos de relleno? Pues eso me ha parecido a mí.

Anna Camp lo intenta, igual que el resto del elenco, pero aún así resulta pesada, y quitando alguna que otra escena bien planteada, no se puede evitar comparar esta película con cualquier telefilm de sobremesa sobre 'desgracias'.

Lo mejor de todo, son los últimos 15 segundos (sí, amiguitos, segundos, no minutos), por eso me recordó a varios cortos de terror que he visto, pero no merece la pena gastar tanto tiempo en verla en su totalidad, y además deja al espectador con muchas incógnitas, pero que tampoco merece el tiempo que se pueda gastar en intentar imaginar o desvelar las posibilidades sobre las dudas que quedan en el aire al finalizar.

Para fans de Anna Camp y pelis de brujería, de esas en las que se lee algo como un poema oscuro y pasan cosas, y al menos en esta ocasión no era en latín ni hebreo. En resumen, bastante floja, aunque siendo un debut en la dirección pudo haber sido aún peor, algo de mérito tiene.

Wolf.