Los Simpson: La casa-árbol del terror XXXII (TV)

Probablemente el peor episodio de Halloween de Los Simpson. La horrible música de televisión de Bleeding Fingers Music y otros efectos de sonido, la horrible voz del que actualmente dobla en España a Willie, la canción de Disney que suena al principio y al final, y la clase de voz que han elegido en España para cantarla, todo ello se une armoniosamente para destrozar una de las series mejor recordadas de nuestra juventud. Si el capítulo tiene humor, no se puede percibir. Sus referencias a las modas actuales son también asquerosas; si es que está fuera de enfoque esta serie ya, no tiene ya a un público objetivo a quien dirigirse. Penoso.

El episodio comienza con una parodia de «Parásitos». La empecé a ver porque estaba buscando un tipo de película en particular, pero como no salía el elemento que quería ver, la quité y busqué otra. No es que no me haya gustado «Parásitos», planeo darle otra oportunidad, pero simplemente no era lo que buscaba en ese momento. Por eso la parodia me resultó un poco ajena y solo entendí el principio. El problema es que en los episodios clásicos te reías aunque no entendieses la parodia, aquí no te ríes aunque la entiendas.

El segundo segmento es el peor, la trama se justifica con un elemento fantástico poco creíble, donde un árbol cobra vida por el impacto de un rayo, lo cual resulta ridículo.

El tercer segmento es quizá el más aceptable, aunque su referencia a Tik Tok no me gusta, pero eso ya es una cuestión personal, pues siento que se dirige ya a otro tipo de público con el que yo no tengo nada en común.

He leído una reseña de IMDb de este episodio y lo compara en calidad con el episodio «The Star Of The Backstage», porque la canción que suena en este le recordó a la manera de cantar de Marge en aquel, argumentando que «The Star Of The Backstage» es el peor episodio de esta serie. Tiene razón, «The Star Of The Backstage» es el peor episodio de la serie. Escribí yo una vez que era el de «The Great Phatsby», pero porque no me acordaba ya cuando escribí esa crítica de que existía «The Star Of The Backstage».