El último golpe

Tropiezo importante del guionista Jeff Nathanson en su primera película como director. El film, basado en hechos reales (aunque no lo parezca), parodia una acción del FBI consistente en atrapar a unos narcotraficantes utilizando el rodaje de una película como tapadera de la operación. No negaré que hay buenos momentos cómicos aprovechando la excentricidad de algunos personajes, pero la base del film es el thriller policial y ahí falla estrepitósamente al no saber mantener ni la intriga ni la tensión, ya que éstas pasan a un último plano en favor de la comedia. Como tampoco es una historia que consiga hacer que el espectador se desternille de risa, sino que sólo consigue arrancar alguna que otra sonrisa de vez en cuando, el film fracasa de forma importante. Nathanson ha desperdiciado un buen grupo de actores en su primera película y, teniendo en cuenta que Hollywood no perdona, veremos cuando dirige su próximo proyecto.

A causa de oir tantas buenas opiniones, me decidí a ver El último golpe, de David Mamet. No se qué leches me distrajo en el videoclub, pero el caso es que acabé con este truño en la pantalla (el hecho de que, en los videoclubs, sustituyan la caja original tampoco me ayudó nada).
Alguna sonrisa, alguna escena divertida, y unos pocos momentos entretenidos. Nada más de bueno se le puede sacar a esta nueva versión de la tan trillada historia sobre el rodaje de una película de serie B.
Recomendable, pero no verla, sino asegurarse de leer también el nombre del director, y no sólo el título de la película, cada vez que alquilemos algún DVD.

Encontré esta película en mi tv cable hace un rato, y recién acabo de terminar de verla.
La verdad es que me pareció muy entretenida, con un guión ingenioso, cómico, con tono de buena parodia, y que se ve favorecida por aceptables actuaciones, lo justo necesario para que la cinta no fuera de un nivel mediocre. Y es importante que agregue que, por sobre todo, "El último golpe" me mantuvo sentado en mi sillón del living desde el principio hasta el final. Porque esta clase de películas son las que demuestran a uno que no hace falta invertir tanto en efectos especiales y millones en dinero, para filmar una película que valga la pena ver. Y lo digo sin desmerecer a grandes producciones cinematográfiacs, ojo.