Natty Gann

Excelente película juvenil de Disney, en color y al estilo tradicional, y mejor que las películas juveniles que hacen hoy en día. Natty Gann, buscando a su padre, comienza una aventura por Estados Unidos. Viajará en tren acompañada de un perro y se encontrará con varios personajes, tanto amistosos como hostiles.

Ambientada en los años 30 del siglo pasado es una película para la que no pasa el tiempo. Con bellas imágenes de la época, autobuses años 30 y otros detalles, nos muestra un mundo duro donde una niña adolescente se ve obligada a buscarse la vida.

Recomendable para los jóvenes y los no tan jóvenes.

Son los tiempos en los que en los Estados Unidos no hay apenas trabajos, ni buenos ni malos, es la Gran Depresión de final de la década de los 20 y principios de los 30, y un padre se ve obligado a aceptar una oferta de trabajo muy lejos de donde está su vida, con su hija y la tiene que abandonar con la idea de unirse con ella en cuanto pueda.

Pero la niña no se resigna, y emprende un viaje por todo el país, en trenes de mercancías, o donde buenamente puede, acompañada por un precioso perro lobo, y por otra persona adulta también con serios para estabilizar su vida. Los tres deben de recorrer aventuras de todo tipo que hacen que la película sea entretenida aunque no pase de eso.

Fue nominada para los Oscar como mejor vestuario aunque no alcanzó el premio de la estatuilla. Convincente el trabajo de la jovencísima Meredith Salenger, el resto de actores, que no son muchos, pertenecen a películas habituales de serie B. Bonitos paisajes y poco más. Aceptable. Un 6.

Película en formato familiar de Disney, para pasar una tarde entretenido en familia. La historia de una chica que parte en busca de su padre. Esta película la vi hace unos dos años, atraida porque en ella sale un joven John Cusack. La película adolece de una frialdad general que no atrae y que hace que los personajes resulten ajenos e incomprensibles. No puedo decir de ella absolutamente nada, simplemente que cuenta con un reparto más que decente y una buena fotografía, pero Disney la magia en esa ocasión se la dejó en el cajón.