Beethoven (Miniserie de TV)

Entre 1909 y 2020, se filmaron unas 16 películas sobre Beethoven, entre películas mudas, cortometrajes y largometrajes, que abarcan distintos períodos de la vida del genial músico. Vi seis de estas películas, de las cuales la que más me gustó es la miniserie objeto de este comentario, producida en 2005 por la BBC, con la calidad artística y argumental que caracteriza a sus realizaciones. La serie abarca toda la vida de Beethoven, ciñéndose a información real obtenida de escritos del músico, como cuadernos y numerosas cartas, y de escritos y crónicas de amigos, mecenas y otras relaciones personales, sin apelar a ficciones ni a suposiciones sobre su vida, lo cual hace creíble lo que de ella se cuenta .
Destaco a dos de los documentos consultados, ambos escritos por el mismo Beethoven, que expresan el dolor que le inflingía su creciente sordera y su profunda necesidad de amar y ser amado. Uno de ellos es el llamado "Testamento de Heiligenstadt", firmado en octubre de 1802, dirigido a sus hermanos, donde expone entre otros temas los perjuicios físicos y afectivos que le causaban su enfermedad, al punto de haber pensado en suicidarse. El otro documento es la "Carta a la Amada Inmortal", escrita en julio de 1812 y encontrada junto al Testamento de Heiligenstadt, en un escondite secreto del escritorio del músico. Según Jan Swafford (*) la "amada inmortal" tal vez fue la única pasión correspondida entre los varios rechazos amorosos que sufrió Beethoven. A partir de la escritura de esta carta, casi completamente sordo, el compositor había perdido la esperanza de formar familia y se recluyó en su música.

A lo largo de los tres capítulos del "docudrama", como ha sido denominada esta miniserie, las distintas instancias de la biografía están presentadas por el director de orquesta Charles Hazlewood, una autoridad en materia musical y con una experiencia de vida que le permite comprender el aspecto afectivo de Ludwig (**).
El actor británico Paul Rhys, encarnó a Beethoven con la solvencia que acompañó su carrera como actor de cine, teatro y miniseries de TV. No es fácil interpretar a un genio capaz de transmitir con su música las más profundas y nobles emociones, a la vez que es poseedor de un carácter difícil, comprensible leyendo sus escritos que mencioné anteriormente, reveladores del infierno que fue su vida condenada al silencio de la sordera.
Los datos obtenidos de testimonios escritos de amigos y otras relaciones de Beethoven, son presentados en forma de entrevistas, muy bien dramatizadas por distintos actores.
En el segundo episodio, reconocible principalmente por su voz, aparece durante breves momentos el tenor Jonas Kaufmann, considerado uno de los mejores tenores de la última década, en el papel del tenor elegido para interpretar a Florestán en el estreno de Fidelio, la única ópera que escribió Beethoven, llamada primero Leonora .

La serie va desarrollando la biografía de Beethoven en su aspecto personal, a la vez que muy equilibradamente refiere a su monumental obra, señalando la evolución de sus composiciones que lo definieron como "el último músico de los clásicos, y el primero de los románticos" (*** ). La calidad de esta producción tributa un honroso y merecido homenaje a Beethoven.

(*) Jan Swafford (2017) Beethoven, Tormento y triunfo. Ed. Acantilado. Barcelona

(**) La razón de la cercanía afectiva de Charles Hazlewood con Beethoven, fue expuesta por el mismo Hazlewood en el artículo que publicó en The Sunday Times el 16 de febrero de 2021, titulado "Como yo, Beethoven fue abusado cuando era niño"

(*** ) La película “Eroica”, hecha en 2003 para la televisión por la BBC, con la dirección de Simon Cellan Jones, se refiere al impacto de la presentación de la Quinta Sinfonía de Beethoven. Las innovaciones que Beethoven impuso a su música hacen que esta Sinfonía, denominada Eroica, marque el comienzo del Romanticismo musical.
La inmensa capacidad de conmover que tiene la música de Beethoven, particularmente a partir de esta inflexión, llega a su máxima expresión con la Novena Sinfonía (*). Así, el 12 de enero de 2003, la partitura original de dicha Sinfonía, de casi 200 páginas, fue inscripta oficialmente en la lista del Patrimonio Mundial de la Humanidad de la UNESCO.