Sexy Durga

Es una película, creo, difícil de entender para los que no son indios. Hay muchas referencias implícitas que a lo mejor un occidental (como yo) no puede pillar. Sin embargo, lo importante se llega a comprender, es más, se llega a sentir incluso de forma desasosegante. Durante todo el viaje, la tensión va en aumento, y sólo deseas que la pareja llegue de una vez por todas a la estación de trenes, pero parece como si estuviera en un laberinto (casualmente, uno de los pósters de la película representa un laberinto) del que no pudiera salir. Se apea varias veces, pero el sitio parece aún peor que dentro del coche, y acaba por acceder a volver a subir siempre. Males conocidos, males por conocer...

La dicotomía de los ocupantes es angustiante: en principio son gente maja que sólo quiere ayudar, pero vemos que disfrutan poniendo nerviosa a la pareja. Y, poco a poco, vamos conociendo detalles que hacen aumentar la tensión*. Y no parecen muy dispuestos a cumplir con la petición de la pareja, que es ir a la estación de trenes cuanto antes. La pareja tiene que insistir muchísimo para que se le haga caso. Es desesperante, yo misma me puse de los nervios viendo cómo la gente no paraba de vacilar a la pobre pareja. No sé si tendrá mucho que ver con la posición de la mujer en la sociedad india, pero lo que sí me queda claro es que los indios no parecen gente seria en la que se pueda confiar.

Y en segundo plano, tenemos la festividad en honor de la diosa Kali. Hombres en trance, colgados con garfios, caminando sobre cenizas ardiendo. Es irónico que adoren a una diosa, pero en la vida real (la parte de "sexy Durga", que, por cierto, Durga es el nombre de una diosa también) a las mujeres se las trate con tan poca consideración.

En fin, si algún día gana el feminismo por aquellos lares, "Sexy Durga" sin duda será un filme referencia del mismo.

Es una película que estéticamente es singular: pocos planos generales (incluso en la festividad se usan planos cercanos, enfocando a partes del cuerpo, o sujeto por sujeto en vez de al grupo entero), zooms ralentizados que imitan la forma de mirar de nuestros ojos (la cabeza se mueve constantemente, y los ojos se van acercando y alejando a ratos del objeto al que están mirando; pues bien, la cámara imita eso), grandes contrastes cromáticos (notorio sobre todo en la escena de las máscaras, imagino que con el objetivo de hacer aún más opresiva la sensación de desesperación que nos transmite Durga)...

Y qué decir de los actores. Actuaciones más fluidas, imposible. Da gusto ver a gente que no es occidental actuar de manera tan convincente. La escena en la que se ríen de los policías me pareció casi genuina. Es una forma más de eliminar prejuicios sociales, la de ver buen cine realizado por otras culturas.

No le he puesto una nota más alta, porque la temática no me interesaba demasiado, y además hay muchos detalles implícitos que debemos inferir por nuestra cuenta, y yo no tengo tanta cultura como para ello. Pero como está tan bien hecha y me ha conseguido transmitir lo que pretendía, creo que se merece el siete.