Houdini (Miniserie de TV)

No es una obra maestra pero me parece una mini-serie de un nivel notable. Aunque sea calificada como mini-serie, es más como una película dividida en dos partes, ya que ambos capítulos sumados deben estar por alrededor de las dos horas y media. A quién le interese la figura del famoso escapista judío, desde luego se la recomiendo.
Es una biografía que toca desde la infancia hasta la muerte de Houdini. Indaga en su vida y personalidad, centrándose especialmente en cuatro aspectos: sus trucos y vida en los escenarios (o en las calles,puentes…), su colaboración como espía para el gobierno, su lucha contra el espiritismo y sus relaciones personales , principalmente con su madre, su mujer, su estrecho colaborador y, en menor término pero relevante, con el también archiconocido personaje histórico Sir Arthur Conan Doyle.
Es una serie muy entretenida, con un estilo y una dirección muy visuales y eléctricos (a cargo del anteriormente nominado a un Oscar Uli Edel, al que no tenía el placer de conocer hasta ahora), con un buen ritmo que ya te atrapa desde la potente escena inicial, en la que el ilusionista se tira encadenado desde un puente hacia el agua helada que le espera abajo, en medio de una gran expectación. La ambientación es buena y la historia tiene un poco de todo: drama, humor, espectáculo, acción... Las interpretaciones son excelentes en general, destacando cómo no su protagonista, el para mí siempre brillante y carismático Adrien Brody ,al que muchos conocimos tras su genial inerpretación en El Pianista. Además, la fascinante psicología del personaje queda muy bien retratada, ayudada de una voz en off en primera persona que me parece todo un acierto.
Si te atrae el personaje y su historia estoy casi seguro de que esta serie te va a gustar. Yo sabía de Houdini muy generalmente pero no de los detalles de su vida, así que me ha gustado a nivel de conocer a un personaje histórico pero de igual modo me hubiera gustado si fuera un personaje ficticio porque es una muy buena historia con la duración justa y contada de manera interesante y entretenida a partes iguales. En definitiva, notable producción la que nos trae desde Canadá el Canal Historia. La recomiendo.
Como diría el protagonista, “todo el mundo quiere escapar de algo”. Pues bien, Houdini te ayudará a escapar durante más de 2 horas de tu vida cotidiana, para viajar al pasado Y adentrarte en su cautivadora historia.

A pesar de haber podido ser rodada como una película (se trata de dos capítulos que duran aproximadamente dos horas) se decidió comercializar como una mini-serie, como ocurrió también hace un año con la alemana “Hijos del Tercer Reich” (que aprovecho para recomendar por sí alguno no la ha visto).

Trata, como su nombre indica, sobre la vida del conocido mago “Houdini” al que da vida el oscarizado Adrien Brody (“El Pianista” o “The detachment”), que hace un gran papel, mientras que el resto del reparto están correctos. La recreación de la época es de las mejores cosas de la película, junto con los efectos técnicos (en la realización y “destape” de los trucos, o en la radiografía de ciertos órganos del cuerpo humano). Sobre el argumento, salvo una cosilla que analizo en el “spoiler”, se ciñe a lo que se conoce del personaje y lo narra de una manera atractiva para el espectador.

El primero de los episodios se dedica a la faceta de Houdini como mago (en una estética que me hizo recordar por momentos a “El truco final” de Nolan); mientras que el segundo se centra más en su persecución contra los fraudes de médiums (lo que me recordó en este caso a “Luces rojas” del español Cortés).

Hay dos ideas de la serie que conviene resaltar:
1. El arte (en este caso la magia) como manera de que las personas escapen de sus propios problemas (incluido también el artista); lo que implica que este último esté obligado en cada espectáculo a superar lo hecho en el anterior.
2. La crítica al espiritismo y a la creencia en el más allá.

En general, serie recomendable, con algunas cosas del guión mejorables (que analizo a continuación).

Atractiva biografía del célebre escapista Harry Houdini, con una esmerada reconstrucción de época, una puesta en escena dinámica y un buen trabajo de Adrien Brody.
Narra con bastante rigor lo que se conoce de la vida del mago. Todo queda reflejado: sus duros comienzos como artista ambulante, su empeño constante en sorprender y ofrecer un espectáculo único (en ocasiones con riesgo para su vida), su innegable talento, su gran preparación física, su interés por la aviación, su preocupación por la competencia de otras formas de entretenimiento, en especial el cine, y su estrecha relación con su madre, que contrastaba con la tensa relación que siempre mantuvo con su padre, un estricto rabino.
Uno de los aspectos más conocidos de su personalidad, su obsesión por el espiritismo, también está presente. En todo momento queda patente que deseaba creer en el más allá, pero chocaba una y otra vez con estafas más o menos elaboradas, que le hacían reaccionar con hostilidad.
Adrian Brody está acompañado por la dulce Kristen Connolly en el papel de su esposa Bess. Es una pena que se limite a mostrar preocupación por los riesgos que corría Harry en sus números o a quejarse del poco tiempo que le dedicaba. Cosas mil veces vistas.
Pero su defecto más importante, a mi juicio, es otro, y lo comento en el spoiler.

Biopic sobre el primer escapista de la historia que revolucionó la magia y la fantasía en todos los teatros del mundo, previamente a la aparición del cinematógrafo y las películas, que con posterioridad coparon el universo de la magia y de la fantasía.

Dirigida por un especialista de las series de TV, como Uli Edel, que dirige de manera correcta a un Adrien Brody que realiza un gran papel metido en la piel de Harry Houdini, un fantástico escapista, siempre escudado y cincelado en las nuevas técnicas y sobre todo en la incipiente ingeniería, gran actor y mago, y también un gran espía en virtud de sus viajes por todo el mundo para exhibir su extraordinario talento.

Sólo cuatro capítulo que se ven de un tirón.

Notable, 7.

Uli Edel ha hecho muy cine ya, tanto para la Tv como para la gran pantalla, y aunque es un director un tanto controvertido, la corriente que hay ahora de actores de reconocimiento haciendo cine para la pequeña pantalla en este caso le va a beneficiar ya que aunque Adrien nos suele dar una de cal por cada dos de arena, lo cierto es que su potencial para este tipo de personajes es magnífico.

La trama resulta muy atrevida y gracias a Brody poco a poco nos enganchamos, ya que la trama tiene los elementos clave para hacernos disfrutar de ella. Por un lado tenemos la vida de un niño y como en su evolución nos prepara para una historia apasionante, con un ritmo adecuado, con ciertos toques de suspense, con algo de comedia y sobre todo con mucha elegancia, que nos transporta a la vida de un mago conocido y nos evoca a tiempos pasados y como tuvo que ser los inicios de dicho personaje.

La historia está muy bien contada y su recreación es muy buena también , no se hace nada pesada y entretiene desde su inicio, con todo esto a su favor la cosa va por el buen camino y si a esto le sumamos la gran interpretación de Adrien, muy expresivo e convincente , bien caracterizado y muy bien llevado durante toda la serie hace de ella un producto muy notable, pero también hemos de sumar el resto del reparto que también esta a muy buena altura.

En su parte negativa, podemos reseñar, los momentos de espionaje y alargar demasiado la caza de brujas final,que aunque tiene cierto aporte para la historia, se hace un poco intrascendente y profundiza poco en el comienzo del cine y su gran repercusión.

Como conclusión podemos decir que se trata de una miniserie muy acertada, con una historia bien contada y con una interpretación muy buena, que hacen de ella un producto para un público muy amplio.

Lo mejor: Brody en todo su esplendor
Lo peor: Que no lleguen antes estas joyitas a nuestras salas o casas.

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