Aux yeux de tous

Impresionante película francesa ( y van...) rodada con una inteligencia superior y sobresaliente y aprovechando unos escasos recursos de manera impecable y absolutamente efectista.
Un atentado en plena estación francesa. Según las autoridades no hay grabaciones del momento. Un alto cargo francés implicado, un buenorro ejecutor y su novia, policía con madre enferma cuya aspiración es volver a Casablanca. La prensa cuelga el muerto ( los muertos) al integrismo islámico, pero la trama es mucho más retorcida.
Todo esto contado a través de cámaras de seguridad y web cams pirateadas con una simplicidad que constituye el auténtico punto aterrador del film. No es ya el atentado, la maldad de los últimos responsables ni las inocentes víctimas lo que provoca pavor, sino ese ojo del hacker que apenas pestañea mientras contempla y se introduce en las vidas ajenas de una forma absolutamente sencilla.
Abierto el debate sobre la libertad de expresión, la intimidad como derecho propio y la seguridad confrontada a esas libertades, la cinta es un acierto rotundo que demuestra nuevamente el vigor, la energía creadora y el poderoso brío que a la hora de innovar contando historias tienen nuestros vecinos.
Aquí se intentó, con peor resultado.
Lo mejor: El punto de vista subjetivo y morboso. Las ganas que le entran a uno de poner una pegatina en la cámara del pc. El terror en estado puro.
Lo peor: No apta para aprensivos, obsesivos e hipocondriacos.
Amigos hackers, tengan cuidado, siempre hay un ojo que observa al que observa.
Perfecta.

Pasable trama (ver spoiler) que narrada de forma convencional quizás tuviera la baraka de haber dado lugar a una interesante película (ejemplos de ello y también de fiascos los hay a puñados). PERO lo inusual de cómo esta contada, prácticamente en su totalidad a través de cámaras de seguridad de interior y calle (parece ser que en Paris existen mas de 600.000), y Webcams de ordenadores personales controladas por un hacker anónimo desde un pequeño cuarto bien equipado en cuanto a parafernalia informática, como vamos conociendo a los implicados en el complot desde la nuca de ese hacker (hasta el final no sabemos quien es ni sus motivaciones), y como mediante una muy buena edición todo ello deviene en un trepidante, fascinante y muy entretenido thriller que te atrapa y sin dejarte respirar te mantiene atento a la pantalla durante todos y cada uno de sus 75 minutos de metraje, a mi juicio la hace merecedora de calificarla como todo un hallazgo, ya que aunque en films como “Enemigo publico 1998” del malogrado Tony Scott (por citar a uno de los mas entretenidos, ya que son mil y uno los castañazos al uso perpetrados) ya se podía disfrutar de situaciones parecidas, detrás de estas estaban agencias gubernamentales con toda la parafernalia satelital y demás; aquí lo original es que sea un hacker a pie de calle el que logre que el espectador se meta en su pellejo y parezca ser participe de sus tejemanejes.

Del tema hacker, conozco lo leído en algún que otro libro de no ficción (recomiendo un muy interesante, serio y documentado ensayo escrito por Misha Glenny, “El lado oscuro de la red"), en también algún que otro articulo de prensa, y como recurrente ingrediente de algunas buenas novelas escritas especialmente en los últimos años, por lo que en principio no me causa extrañeza lo fácil para los iniciados que parece ser acceder a Webcams privadas, localización mediante seguimiento de teléfonos móviles y audio de los mismos, por lo que quizás chirríe un poco bastante que alguno de esos conspiradores parezcan no ser conscientes de esas circunstancias y hablen de lo suyo sin tomar la minima preocupación de apagar los teléfonos, pero bueno, esto es cine y de lo que se trata es de hacer avanzar la trama y ponernos (al hacker y al espectador simultáneamente) al tanto de lo que se va cociendo.

Sirva el anterior párrafo como explicación a la huella que la función ha dejado en el que esto escribe, ya que supongo que si hay algún versado en el universo hacker, puede que tuerza el gesto ante mi desconocimiento mas allá de lo anteriormente expuesto, y sea otra el impacto que la película le provoque (cosa que hago extensiva al despistado que le suene a ficción).

En fin, insisto y reitero, buen thriller que mediante una soberbia edición, buenas escenas de acción, aceptables actuaciones, e interesante componente dramático, me ha dado una hora y cuarto muy entretenida.

Interesantísimo thriller vanguardista, efectivo y muy entretenido. Los recursos empleados para esta cinta son realmente mínimos en comparación de muchas producciones Hollywodenses, pero aquí se nota la creatividad y la originalidad de una muy buena historia que yo la catalogaría como “Cuando el destino nos alcance”….y falta poco para que esto suceda, sobre todo en las grandes metrópolis.

La originalidad de la historia es el plus de esta cinta, Hackers existen hoy en día y realmente no se cuanto sea su alcance, pero aquí tenemos a uno muy bueno que hace de las suyas en esta entretenida cinta.

No quiero ahondar en cuestiones de tipo informático, no es mi fuerte y no me considero un experto. Aunque como argumento de un film, el tema y la forma en la cual se trata, es totalmente inteligente y atractivo para la audiencia. El filme es fantásticamente original, como también lo es su manufactura, vanguardista, actual e innovadora.

Jajaja, aparte no paré de ver mi web-cam todo el tiempo que estuve enganchado con esta peli…

Muy recomendable.

"Aux yeux de tous" es una pelicula que atemoriza. Pero no por las imágenes sangrientas, son lo más inocente y despreocupado. Mucho más atroces es común ver en cualquier película de suspenso, thriller o terror. Es acerca de ser espiados, que todo está observado lo que da pavor. Como un mandato bíblico somos culpables por solo existir. Nos observan en todo momento. Nos espían. Orwell en la cima. Lamentablemente tenía razón. Y en la sociedad actual es culpado (Snowden) aún sin juzgarlo, por decir lo que George Orwell escribió en un libro (mientras era espiado). El film muestra como cualquiera que tenga la habilidad y un mínimo de tecnología puede hacer una fracción de observación de la que hacen los profesionales en toda nuestra vida. Buen suspenso y una trama que atrapa

¿Te has parado a ver cuántas cámaras nos vigilan en nuestro día a día? Seguro que te asombrarías.
Este es un film entretenido y efectista que nos presenta como las cámaras, cualesquiera y donde estén, son testigos (in)móviles de nuestras vidas, para bien y para mal.
La trama se centra en Paris, donde la cantidad de cámaras de vigilancia es bastante considerable dando pie a cualquiera que tenga los medios adecuados a poder vulnerar su seguridad entrometiéndose en submundos que no debería ver.
Y de nuevo el tema de nuestro derecho a la intimidad y la manipulación de ésta sale a escena, haciéndonos formar parte, como voyeurs que somos, de esa condición y mostrándonos una serie de acontecimientos que a día de hoy ya no son tan irreales como en un tiempo pasado. Y es que la tecnología a la que estamos acostumbrados y que tanto nos facilita la vida en nuestro día a día es un arma de doble filo, capaz de salvarnos la vida como de hacernos un mal irreparable en manos ávidas de controlarlo todo, (y a todos).
Si queréis pasar unos setenta y cinco minutos de intriga y que a medida que vaya transcurriendo la película la tensión vaya incrementándose, entonces esta es una buena opción.
Apagar móviles y ordenadores (si los tenéis delante), no vaya a ser que os estén observando