The L Word (Serie de TV)

La serie es interesante, especialmente por el hecho de que sus personajes son mayoritariamente lesbianas y ello lleva a que se reflejen situaciones que, aunque las sufren/disfrutan personas con un nivel de vida difícil de creer, dan una idea de lo que ocurre en este colectivo.

Eliminado el punto de novedad argumental, con cuatro temporadas ya emitidas, ha caído en el problema habitual de toda serie longeva: incoherencia en algunos personajes e historias y falta de ideas. No obstante, la salvo porque al menos en cuanto a rodaje y montaje sigue ofreciendo momentos fantásticos, como el final de la cuarta temporada en la escena de cama de Shane con la madre soltera de cuyo nombre no me acuerdo.

Si por mí fuera, 'mataría' la serie en la quinta temporada, puesto que su función visibilizadora ya ha sido cumplida y se requiere pasar a un nivel distinto. Quizá podría explotarse el personaje de Alice, cuyo carácter va más allá de su orientación sexual, y crear una sit-com a partir de ella en la que las historias vayan más allá de las preferencias carnales...

Amalgama de historias poco creíbles sobre la promiscuidad de un grupo de amigas lesbianas (todas ellas de muy buen ver) de la "Jet Set" de Los Ángeles que allá por donde van solo se encuentran con más lesbianas (aún de mejor ver) salpicadas de tórridas escenas sexuales con alto contenido explícito.

Entre medio se puede encontrar alguna pequeña historia alejada de lo puramente sexual y algún personaje hetero como la hermana de una de las protagonistas o el exmarido de otra de las protagonistas (y creo que alguno de los extras que salen al fondo también es hetero), se podría llamar ¡la vida en el Guetto Gay!

Si tenemos en cuenta que el leit motiv de la serie es el sexo (en mayor medida que en la serie Sexo en Nueva York aunque en versión gay) comprendo que halla gente que la siga, algún tío y sobre todo lesbianas, y no por que se vallan a sentir identificadas (a no ser que sean estrellas del Rock o importantes ejecutivas que vivan en Hollywood y ni aún así), sino porque es un carrusel de revolcones entre mujeres de bandera.

No es que la serie no me entretenga en los tiempos muertos en los que no tengo otra cosa que hacer. Y es posible que haya que reconocerle un poquito de mérito por destapar el tabú del lesbianismo y conseguir que este tipo de serie tenga una audiencia considerable.

Pero desde mi punto de vista, las chicas de L me parecen sospechosamente parecidas a las de Sexo en Nueva York. Su manera de afrontar la relaciones de pareja y la vida en general (pese a ser homosexuales) son bastante similares.

Claro, que se trataría de una versión de Sexo en NY echa por una aspirante a aprendiz de Sofía Coppola. La serie es pretenciosa, reconozcámoslo.

Esto lo digo por el "exquisito refinamiento" a la hora de presentar los conflictos y las dudas existenciales de este grupito de amigas. También por la insistencia en captar a un público de la élite intelectual que se identifique con sus protagonistas: una escritora que parece una torturada Emily Dickinson pero que no me creo que haya leído un buen libro en su vida; una directora de una prestigiosa galería de Arte que parece una alta ejecutiva pero luego tiene la sensibilidad a flor de piel en cuanto al arte; una camarera que parece tener un Doctorado en Harvard; una periodista, una tenista famosa... todas ellas súper divinas de la muerte y súper profundas.

Parece que al fin, como ya pasó con Sexo en Nueva York, las chicas lesbianas (y también heterosexuales, pues son muchas las que siguen la serie) tienen un patrón prefabricado, listo para usar, de lo que deben ser, o al menos parecerse.

Y digo yo; ¿Y las chicas que son (independientemente de la orientación sexual) bajitas, gordas, con un curro mediocre y sin pretensiones intelectuales..... no son interesantes?

Quizá no para este tipo de series; pero sí para otros muchos aspectos de esta vida.

Primero decir que la serie tiene sexo bastante explícito, por lo que lo que se escandalicen ya se pueden abstener de verla.

Respecto al tema de la sexualidad, hay una provocación continua en la serie. No tengo muy claro si esta serie gustará más a los gays o a gays y a heteros por igual, solo puedo decir que a mí me ha gustado mucho porque es uno uno de los mejores culebrones que he visto jamás, y además dramático, creible y con excelentes interpretaciones.

Es un Sexo en Nueva York versión gay, o mejor dicho un Queer as Folk versión lésbica, aunque creo que es bastante más profunda que Queer as Folk. Es obvio que es de las pocas series creadas para el público homosexual, es un culebrón de calidad para lesbianas.

Muchos/as se quejan de que no es muy realista, pero Sexo en Nueva York tampoco lo fue y ha marcado un antes y un después en los culebrones.

Lo peor: El ambiente tan ricachón.
Lo mejor: Las actuaciones.

La verdad es que me llevé una grata sorpresa cuando empecé a ver la 1ª temporada y me enganché y tuve que ver la 2º y la 3ª. Son tramas de lo más cotidiano que pueden pasar a los seres humanos, contados de una forma muy respetuosa y dentro de lo que cabe realista, a pesar de que se emite en EEUU, país moral a tope, pero si la emiten en TV y la 4ª la van a emitir a partir de enero'07 será por algo.
Actuaciones, Jennifer Beals fantástica y Pam Grier genial (Jackie Brown) .