Dónde está Anne Frank

Entre las películas que pudimos ver el año pasado en el Festival de Sitges, está esta pequeña joyita de animación, que incluso participo a competición en el Festival de Cannes, algo raro porque no suelen seleccionarse a competición (salvo raras excepciones) películas de este género.

El film está contado desde la perspectiva de Kitty en la actualidad, la amiga imaginaria de Ana, a quien escribió entradas en el diario entre 1942 y 1944. Esta emprende una búsqueda para encontrar a la familia Frank desaparecida. Con su diario encima desencadenará una persecución por toda la ciudad, allí conocerá a Peter un ladronzuelo que le dice que, aunque hayan pasado décadas de aquello, la historia puede volver a repetirse...  

El director y escritor israelí Ari Folman que ya tiene en su haber dos estupendas películas "Vals con Bashir" y "El congreso" se mete de lleno en esta triste historia para hacerla llegar a un público más joven lo ocurrido en el holocausto, utilizando animación tradicional muy colorista en algunas ocasiones.

Sabe conjugar muy bien la animación con el mensaje claro que da, de que la humanidad debe ser más amable y compasiva, evitando el odio y las guerras.
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Años después de la notable “El congreso” Ari Folman realizó este largometraje relaciionado con las memorias de Anne Frank escritas por Folman y David Polonsky en el libro “El diario de Anne Frank”. Sigue los pasos de Kitty, la amiga imaginaria de Anne Frank a la que le dedicó su diario. Como una decidida adolescente, Kitty se despierta en el futuro, dentro de la casa de Frank en Amsterdam, y se embarca en una aventura para encontrar a su mejor amiga convencida de que sigue viva en algún lugar de Europa. Aunque la joven muchacha queda impresionada ante los avatares del mundo moderno, también se sorprende por el legado que ha dejado Anne tras de sí. En su camino no solo descubrirá la terrible historia de Ana, sino también la que viven muchos otros niños en Ámsterdam a día de hoy.
Esta coproducción belga impulsada por la fundación Anne Frank es una cinta de animación en 2D que relaciona el aspecto histórico sobre el Holocausto y el contemporáneo sobre el drama migratorio de manera un poco forzada aunque tiene una voluntad didáctica dirigida a los jóvenes a favor de la paz y evitar la guerra y habla de cómo la figura de Anne Frank se ha convertido en un producto de consumo. Cabe señalar que el estilo de la animación es un poco inferior a anteriores trabajos de Folman y simplifica a las figuras de los nazis, quizás porque quiere llegar al público más joven. Hay que decir que la película no es una biografía al uso de Anne Frank y se centra en el personaje de Kitty, cuya voz en el doblaje español es de la actriz Michelle Jenner; además hay que destacar la música compuesta por Ben Goldwasser y Karen O. El film se ve con agrado e interés, se presentó fuera de concurso en el festival de Cannes del año pasado, en la sección oficial del festival de Sitges y fue nominado al premio del cine europeo en su categoría.

Valoración: 7
Lo mejor: es una propuesta con intención didáctica hacia los jóvenes.
Lo peor: la obra es un poco inferior a anteriores films de Folman.

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Es elogiable la interesante animación y la idea original del guión (que la amiga imaginaria del diario de Anne, Kitty, cobre vida y busque a Anne Frank en la Amsterdam actual).
Supone una relectura de la persecución y deportación nazi en los tiempos actuales con los sin papeles, inmigrantes ilegales y/o refugiados.
Pero más allá de ello, la película es otra versión más del diario de Anne Frank, algo plumbea, sin contundencia y basada en un homenaje sesgado y sin tapujos a la figura inmortal de Anne Frank. La música "indie" triste y lánguida que acompaña el film es un reflejo de esta nueva versión.

El israelí Ari Folman parece tomarse su tiempo entre largo y largo con cadencia de más de un lustro entre trabajos. Y sigue cambiando de registros en cada uno de ellos sin que su calidad y acierto deje de ser notable.

Aquí nos encontramos con un encargo de la Fundación Anne Frank, que Folman parece dudó en aceptar pero una vez puesto optó por una visión "arriesgada" de puesta al día de esa niña alemana de ascendencia judía y su familia, convertidos en un icono del holocausto a través de su inmortal diario en el que relató durante los dos años y medio que estuvo oculta de la barbarie nazi en una buhardilla en Ámsterdam, sus penurias, ilusiones adolescentes y deseos de convertirse en escritora. Su padre que sobrevivió a dicho holocausto publicó el diario en el 45 con el nombre de "La habitación de atrás" editando y suprimiendo algunos capítulos en los que Anna hablaba sobre su incipiente sexualidad y sobre su madre.
 
Influida por la serie de novelas para niños "Joop fer heul" de la escritora holandesa Cissy van Marxveldt (1889-1948), Anna toma el nombre de Kitty, uno de los personajes, para crear una amiga imaginaria entre otros, a la que escribirla y poner nombre a su diario. Y es en esta Kitty en la que se apoya Folman como protagonista de esta historia para rastrear en el presente lo que queda del auténtico legado de Anne Frank más allá de que su nombre esté en todas partes. Para ello conecta el sufrimiento de los judíos, entre otros colectivos, con las penalidades que hoy día sufren los inmigrantes.

La crítica social no pasa de ser un esbozo que se mezcla con un afán didáctico de dar a conocer a Anna Frank a las nuevas generaciones y el tono general consigue un precario equilibrio en su intento de llegar a adultos y adolescentes, más que niños. No por ello el resultado final deja de ser notable y necesario.

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Ari Folman vuelve a la gran pantalla, de la mano de la Fundación Ana Frank, con una nueva adaptación del famoso diario de la niña, mundialmente reconocido por ser un testimonio vital en primera persona de una víctima del nazismo. El espectador podría pensar que no encontrará nada nuevo en un título que recoge un tema excesivamente explotado en la industria del cine, pero, en su lugar, se cruzará con una refrescante y cuidada animación que ofrece una perspectiva distinta de las memorias de una de las figuras más emblemáticas de la historia contemporánea. Esta es la biografía de Kitty, una heroína feminista, mejor amiga imaginaria de Ana y destinataria de las cartas que componen su diario personal.

Por medio de una fluida animación 2D y una fotografía espectacular en color y composición, que adentra al auditorio de lleno en el relato, Dónde está Anne Frank es un largometraje que expone el horror del Holocausto a través de la imaginación como herramienta de evasión y la vida en movimiento incluso en tiempos de guerra; pero también la triste realidad social moderna. Y es que esta producción no se postula como una crítica al régimen nazi únicamente sino a la violencia en general y a la marginación de las minorías. Es por ello que el director decide utilizar los recuerdos de Ana Frank para confeccionar un guion que se dirige mediante una mirada retrospectiva a épocas pasadas al mismo tiempo que echa un vistazo hacia los problemas de hoy en día.

Todo esto ocurre a través de la figura de Kitty, quien resurge del diario de su creadora. Durante el filme, la protagonista entra y sale del libro para mostrar la realidad de cada momento. De esta forma, se presenta un intento de comparativa entre las dos etapas históricas que ofrece una serie de paralelismos, los cuales enmarcan la cinta en un contexto de denuncia social. Desafortunadamente, aun con buenas intenciones y algunos clips que logran causar gran impacto y admiración, este ejercicio no consigue ejecutarse con la contundencia esperada.

Asimismo, durante el transcurso, se incide en temas trascendentales como la emancipación de Kitty, que más tarde quedan en nada. Aun así, es más que suficiente para cumplir con el objetivo del metraje: ilustrar a los más pequeños, que solo necesitan absorber las ideas principales.

Por otro lado, uno de los puntos más fuertes de esta crónica es, sin duda alguna, su magnífica banda sonora. Gracias a sus piezas musicales, los puntos álgidos de la trama dan paso a secuencias emocionantes y vibrantes –impregnadas de un tinte épico y de esperanza– que pueden llegar a sorprender gratamente. Es en esta clase de escenas donde la narración cobra una magia que la hace especial, pudiendo llegar a provocar incluso algunas lágrimas de emoción. Por otro lado, las piezas instrumentales, acompañadas por imágenes sobrecogedoras de la masacre, también tienen el poder suficiente para abrumar a la audiencia.

En conclusión, Dónde está Anne Frank es una propuesta original, llena de inventiva y magia que, aun con algún que otro error de guion, no pasa desapercibida y se erige como una hermosa y cruda obra que emociona y atrapa al público.

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