Aeropuerto 77

Aeropuerto 77 es, para mi gusto, la mejor película de la irregular saga dedicada a catástrofes aéreas. Aquí, al contrario que en las otras entregas por el estilo, el dramatismo está bien conseguido, la sensación claustrofóbica que produce el fuselaje sumergido es muy inquietante y casi todos los actores de primerísima fila que conforman el reparto están al servicio de la película y no al revés...salvo el gran Jimmy Stewart, que aquí realmente muy poco hace sino decir unas pocas frases...

Un insólito Jack Lemmon con bigote es protagonista absoluto de la cinta, bien escoltado por unos soberbios Christopher Lee (como siempre) y un entonces desconocido Robert Foxworth: recordad que representó el papel de Chase Gioberti en la famosísima serie "Falcon Crest" y, antes de esto, ¡rechazó el papel de J.R. para la futura Dallas!

Reconozco que este tipo de películas no son las más adecuadas para que las disfrute gente con aprensión a volar, pero es justo reconocer que son un buen antídoto contra esa extendida fobia. En todo caso, Aeropuerto 77 es una destacada cinta del cine de catástrofes tan en boga en los 70 que merece ser rescatada del olvido.

Sin ningún tipo de sorpresa esta nueva entrega de la serie “Aeropuerto” nos vuelve a contar una tragedia humana dentro un avión, en este caso el aparato es secuestrado y termina cayendo en las aguas del fondo marino de las Bermudas al intentar esquivar los radares, quedando atrapados dentro del mismo y como siempre esperando desesperadamente un rescate. Siguiendo el esquema habitual de este tipo de películas saldrán a relucir las diferentes personalidades de los protagonistas que como siempre responden a los estereotipos clásicos (el héroe, el cobarde, el gracioso etc..), una película para amantes de ese género que tan lejos quedó y que aún continúa teniendo su gracia y por supuesto su público.

Jerry Jameson no se tuvo que comer mucho el coco para dar con la clave para que funcionara esta película. Por un lado aprovechar la corriente del momento en Hollywood. Cine catastrófico a más no poder y luego saber rodearse de un elenco de actores curtidos en mil batallas y muy conocidos en la pantalla.

Jack Lemmon, ( El apartamento ) se convierte aquí en un ocasional héroe, personaje novedoso en su exitosa carrera. Lee Grant, ( Shampoo ), la ganadora de un oscar encarna el papel de mujer soberbia y egoísta casada con Christopher Lee, ( El Conde Drácula ) el cual vive una penosa vida al lado de esta bella dama. Brenda Vaccaro, ( Cowboy de medianoche ), interpreta a la futura esposa de Lemmon. Olivia de Havilland, ( Murieron con las botas puestas) en uno de sus últimos trabajos. James Stewart, ( Qué bello es vivir ) como el dueño exclusivo del impresionante avión a estrenar. Aunque muchos de estos personajes tienen un papel secundario, siempre agradece uno el volver a verlos actuar.

La historia: Un millonario coleccionista y dueño de un impresionante avión, prepara un viaje para recibir sus cuadros y a sus amigos en la ciudad donde vive. El avión es todo adelanto tecnológico y seguridad a bordo, preparado para la guerra. Pero para lo que no estaban preparados era para que parte de la tripulación terminara enviando el avión al fondo del mar.

La primera vez que ví esta peli hace ya muchos años, me consiguió pegar al asiento hasta el final, sin pestañear, sin mirar el reloj. Ahora me ha ocurrido lo mismo. La sensación de claustofobia, por momentos es asfixiante y te llegas a preguntar cuando la ves por primera vez, si en verdad lograrán sacarlos de ahí. El guión es lo bastante ligero y entretenido para hacerte la cinta muy amenta y puedas disfrutar sin entrar en temáticas que no vienen a cuento para alargar la película.

Recomendada a todos los amantes del género, se encontrarán algo novedoso y fuera de lo común.

Clásico entre clásicos del género de catástrofes con un experimentado reparto que es siempre baza segura de cara al resultado final. La película ofrece unos planos magníficos y muy bellos del gran avión así como de todo el despliegue marítimo siendo éste uno de sus puntos fuertes. Sin embargo el espectador tardará en entrar en la película y no lo hará hasta el propio despegue del avión, existiendo por tanto una cantidad de metraje que puede pecar de prescindible durante el inicio.
Todo lo narrado y mostrado se hace muy detalladamente, con varios planos y secuencias de larga duración que muestran con milimétrica precisión los procedimientos seguidos durante toda la película.
El argumento es bueno, salvo algún que otro desafío a las leyes de la física, e incluye tramas secundarias que no se terminan de desarrollar durante la película, siendo la trama principal la única en la que se acaba centrando la misma olvidándose de profundizar en esas pinceladas mostradas durante la primera parte de la película.
Una buena película que sobre todo ha envejecido muy bien, con unos planos del avión magistrales a la par que espectaculares pero que quizá peque de falta de ritmo durante algunos minutos, a pesar de contar con un buen elenco de actores experimentados

Tercera entrega de la saga mítica de "Aeropuerto". Después de una segunda película muy mediocre, en esta ocasión se recupera la calidad que se desprendía de su primera entrega.
En esta ocasión el encargado de llevar el timón es un siempre fantástico Jack Lemmon, acompañado de grandes actores clásicos como Joseph Cotten, Olivia de Havilland, James Stewart o Christopher Lee. Todos ellos realizan personajes secundarios, pero aportan todo el dramatismo que se requiere en esta nueva catástrofe aérea.
Hay que apuntillar que George Kennedy vuelve a participar en este film, consagrando así su cara en esta mítica saga.
En esta ocasión la catástrofe que sufre el avión no solo se vive en el aire, sino que el aparato se verá sumergido bajo el mar con todos sus pasajeros vivos. Es aquí donde el gran drama aflora y la lucha por la supervivencia anida en cada personaje.
"Aeropuerto 77" presenta un suspense y una intriga desde el principio. Capta la atención del espectador sin ningún esfuerzo, y se sufrirá viendo como el futuro de cada personaje se va agotando con cada soplo de aire.
Es una suerte haber recuperado la confianza en esta saga después de que su antecesora fuera una película bastante mediocre.
En fin, película muy interesante junto con la primera; y con la que uno podrá disfrutar viendo reunidos a grandes actores en un mismo film; unos actores que aunque ya tuvieran sus añitos cuando se rodó esta película, demuestran que su talento no tiene edad.