Ragtime

Ragtime cuenta las historias de varios personajes en el Nueva York de comienzos del siglo XX. La historia que más peso tiene es la que protagoniza Howard E. Rollins Jr. Un virtuoso pianista de raza negra que después de sufrir una afrenta por parte de unos bomberos irlandeses, decide defender su dignidad hasta el final. Primero de acuerdo con la ley, como ciudadano educado que es, pero al no conseguir nada pondrá en práctica métodos más expeditivos. Todo ello desencadenará un violento drama racial.

Ragtime es una de esas películas históricas que de la mano de Milos Forman se convierte en una obra interesante y llevadera a pesar de su extensa duración. Destacaría la ambientación, la banda sonora y un completo reparto de veteranos actores y jóvenes promesas entre los que destacan los debuts de Samuel L. Jackson y Jeff Daniels.

La película supone una denuncia contra el racismo y la hipocresía de las clases pudientes, quienes se muestran muy religiosas mientras no tengan que tomar partido en la defensa de las injusticias.

A lomos del "tiempo rasgado" que se escapa de los pianos del Jazz de los primeros años del siglo XX nos llega la historia de un hombre negro que eligió el vehículo de la música para buscar y encontrar dignidad; también nos llueven mezclados con estas melodías sincopadas retazos de otras vidas: inmigrantes y mujeres de vida alegre salvados por el cine, escapistas de éxito, anarcas perdidos, políticos vendedores de aire, racistas con malos modos y racistas políticamente correctos.
Tras repasar el "modus vivendi" en las abigarradas calles de Nueva York, para demostrarnos que también hay vida en los estercoleros, Milos Forman se va centrando en el personaje que mejor entiende el Rag, el músico Coalhouse Walker, un orgulloso artista que ha atravesado ya el río saltando sobre piedras resbaladizas y pisando la espalda de algún caimán. Ya en la otra orilla la vida se ve de otra manera... pero desgraciadamente la felicidad es demasiado caprichosa como para quedarse a vivir en casa de los pobres.

El director, en algunas ocasiones de manera forzada, hace que la vida de los intérpretes se cruce y descruce en torno a la odisea del pianista que acaba siendo el hilo conductor y el león sanguinario que todos los pacifistas llevamos dentro.

Adaptación de una extensa y compleja novela de E. L. Doctorow, que hace un paisaje de la sociedad norteamericana en Nueva York en el período 1906-1914, una época de progreso, inmigración y, por supuesto, de racismo contra los negros afro-americanos. En este último aspecto de la narración se centra la película a partir de una novela en la que se cruzan varias historias, algunas trágicas, en las que se incluyen personajes que fueron reales y una multitud de personajes de ficción, así como situaciones que no sucedieron como se las describe, y líneas del relato que fueron abandonadas después de ser introducidas en las escenas, debido a la extensión de la película y a la variedad de destinos de los personajes. De todos modos es una muy interesante película sobre el período, tanto social como económico y cultural, el período del "rag-time", un estilo musical que precede a la difusión del jazz, con bellos escenarios, vestuario y buena música, y actuaciones no deslumbrantes pero muy discretas. Del famoso director checo de "One Flew Over The Cuckoo's Nest" y "Amadeus." Para ver.

Interesante propuesta cinematográfica sobre la vida de una familia acaudalada de N.Y de principios de S.XX. Forman nos muestra como de una simple bola de nieve se crea una avalancha que destruye o modifica la vida de las personas que están más cerca de la bola en ese momento.
Al comienzo de la película no me esperaba una historia con un final tan impactante y tan brutal. Te rompe un poco los esquemas de todo lo que puedas pensar sobre la violencia y el racismo, y de lo que tiene que hacer una persona para que la escuchen, para que sepan de la injusticia que se cometió contra esa persona, y todos los errores y tragedias por las que pasa para que simplemente se le reconozca su derecho y se le repare dicha ofensa. Es muy triste que pueda haber una historia real que pueda parecerse un mínimo a la de esta película. Aunque seguramente, la realidad es mucho más estremecedora

Si el cine es la celebración de la alegria de un momento , Ragtime para mi es un estado de animo , pelicula que siempre estará dentro de mi , un ritmo , una elegancia interna hace avanzar las impresiones, los recuerdos de una época pasada .
En fin una celebración del cine que te llena , que te hace reconciliarte con ir a una sala oscura