Operación Red Sparrow

Durante los primeros 40/50 minutos mira me que estaba convencido en dejarme penetrar... por la interesante historia no seamos mal pensados. Pero pasados esos minutos te dije aquello de "vete a casa, estás borracho".

Empezamos bien, con la ambientación y el personaje de Lawrence desarrollándose. Poco a poco nos va llevando donde quiere con ritmo, con contundencia sin dejarnos pestañear... pero según se avanza hay cosas...
La primera es como el tiempo en "la escuela" que tenía mucho por ofrecer y tiene momentos excelentes se lo fuman en menos de 10 minutos con un "ya lleva aquí 3 meses...".
Seguimos con la ambientación tan lograda (aunque muy vista) pasa a no encajar. Solo nos dicen que es pasada la guerra fría pero hay escenarios que parece los 70's y otros parecen los 90's. Incluso usan disquetes y retransmisión en vivo (estos rusos que por lo visto tenían fibra ya en aquella época).
Luego la trama avanza pero despacio, con mucho relleno, teniendo los personajes un nulo desarrollo y queda hora y media...

Las actuaciones son correctas, nada del otro mundo. Siempre dije que Lawrence es buena actriz pero que tenga un Oscar es resultado de un chute muy fuerte. Además que haga escenas con desnudo no veo que mérito tiene en pleno siglo XXI...

La conclusión es que tenemos una correcta película de espías que tiene un inicio trepidante y se va desinflando en su larga duración.
Gorrión casi me llevas a la cama pero no llegaste a penetrarme.

Interesante película de espías, intrigas que roza un poco el cine erótico de los noventa. Un thriller bastante solvente con un sólido guión. Tiene destellos de alguna película clásica del género de espías y de la guerra fría.
Es dura, es difícil de digerir el conflicto familiar que plantea este film. A la vez es original y plantea caminos nuevos sobre la maldad del ser humano.

Jennifer Lawrence hace un buen papel de rusa bellisima que se transforma de una inocente bailarina a una espía capaz de actuar con una frialdad solo comparable a la de su tío.
Joel Edgerton hace un corto papel y no aporta mucho a la historia, le falta química con la protagonista y hace de chico guapo tonto, de chico Bond.
Jeremy Irons también hace un corto papel, pero interesante y crucial en la historia porque aparece como posible protagonista muy creíble en la trama final.

Pero el verdadero protagonista masculino es Matthias Schoenaerts con una ausencia de sentimientos afectivos que le convierten en un psicópata del mal, vacío por dentro.

Sin muchas expectativas me dispuse a ver esta "Gorrión Rojo", que por su argumento sabía hacia donde iba a ir encaminada, pero en fin, esperaba que se saliera un poco de la norma y aunque así ha sido, al final me deja la misma sensación de siempre.

Protagonizada por Jennifer Lawrence, va de una famosa bailarina rusa que tras un accidente, se ve obligada a trabajar como espía en el programa de los gorriones rojos ya que de ella depende su madre, aquejada de una invalidez.

El argumento es de lo más común que puede haber sobre cines de espías. Te presentan a Rusia como el mal personificado, que no solo es un lugar desprovisto de cualquier tipo de libertades sino que además es corrupto hasta la médula y se aprovecha de las desgracias de personas como la protagonista para forzarlas a trabajar en sus macabros operativos de espionaje. Y por otro lado tenemos a los bienhechores norteamericanos, país que protege y se preocupa por sus espías y que no solo no mata ni nada que se le parezca sino que busca la paz mundial.

Dando por bueno el cúmulo de topicazos del párrafo anterior, la película se desarrolla de manera muy lenta y por momentos confusa. Sí que es cierto que no es tan típica desde el punto de vista de cómo se desarrollan los hechos, pues aquí no veremos espías que saben hacer de todo, y cuando digo de todo es todo tipo de artes marciales o manejo de armas. Al contrario, la película es sucia, con unos personajes que por momentos resultan bastante humanos, sin secuencias espectaculares y poniendo el foco en un aspectos muchas veces omitidos en este tipo de temas, como el hecho de sonsacar información a altos cargos a base de actos sexuales y cómo se les entrena en dichas artes (viendo películas pornográficas de todo tipo o haciendo el acto en medio de la clase). Las contadas partes donde hay algo de acción, son igual de sucias, nada espectaculares, pero que sí reflejan cierto realismo dentro de lo que es la película.

Las actuaciones no son nada del otro mundo. Lógicamente Jennifer Lawrence es la que más destaca y lo hace bien como esa espía imperturbable pero con un puntito de vulnerabilidad. Del resto del reparto no destaco a nadie, salvo a Matthias Schoenaerts.

Por lo demás, no se si es por haberla visto directamente doblada al español, pero en ningún momento hablan ruso, cosa que a mi me desconcertó un poco.

Película sobrevalorada (lo digo por el alto 6,4 de nota media que tiene) de espías con cierto tono "retromodernista" (ambientada en la actualidad o hace pocos años, pero como si aparentasen recrear los años 70-80) cuyo mayor y a la postre único aliciente es el morbo que despierta Jennifer Lawrence, aquí hipersexualizada y con varias escenas de sexo duro y detallistas desnudos.

"Gorríón Rojo" se hace larga y tediosa por momentos y acaba uno perdiendo el interés que despierta en el primer tramo. Amo a Jennifer pero ni ella puede levantar esto, acompañada por esa vieja gloria perdida desde hace muchos años en papeles secundarios sin riesgo (Jeremy Irons), Joel Edgerton (es de risa el primer polvo entre éste y Lawrence, por lo forzado y lo exprés) o el mojabragas belga Schoenaerts, aquí en un papel menos agradecido.

Aprobado muy, muy raspado.

La empecé a ver en la tele pues tenia buena puntuación, decían que era una peli adulta y tal. Y sí, doy fe, la peli está bien hecha, tiene buena fotografía y un clima de lo más inquietante; pero más que adulta es desagradable. Porque se recrea en torturas psicológicas y físicas de una insólita crueldad. Se ve que el director disfruta enseñando como maltratan y humillan a una mujer de todos los modos posibles. En fin, no me lo estaba pasando nada bien, estaba sufriendo demasiado, y aunque solo faltaba media hora para que acabara, la dejé y me fui a dormir. Pero me he quedado con la curiosidad de saber cómo acaba. También me he quedado con muchas ganas de pegarle un puñetazo en la boca al director. De lo que estoy seguro, en cualquier caso, es que a Tarantino le encantará.