Haz click aquí para copiar la URL

Baraja: la firma del asesino (Miniserie de TV)

6,0
1.572
Serie de TV. Documental 3 episodios. Serie documental que narra, veinte años después, cómo se fraguó el último asesino en serie de Madrid y el más famoso en la historia de España. Su particular modus operandi de identificar sus crímenes con naipes de copas de la baraja española propició, al mismo tiempo, la atención de los medios de comunicación y la histeria de la ciudadanía. A lo largo de sus tres capítulos, la docuserie disecciona un caso que aglutina ... [+]
1 2 >>
Críticas 9
Críticas ordenadas por utilidad
10 de junio de 2023
31 de 36 usuarios han encontrado esta crítica útil
Me gusta el ámbito de la crónica negra. Siempre desprende ese morbo que se hace atractivo. Asomarnos a ese precipicio pero desde la seguridad de nuestra tv o de nuestro ordenador. Hay mucho que analizar de este caso mucho más allá de Alfredo Galán o los crímenes que cometió.

Hay una cosa en la que suelen coincidir periodistas y criminólogos cuando les hacen una entrevista, y es el alto nivel que tienen los cuerpos de seguridad en España. No obstante, si miramos los casos que se han hecho famosos como el de Tony King, en el que se encarceló a una inocente mientras el asesino seguía libre y matando, el de José Bretón que asesinó a sus dos hijos, siendo confundidos los huesos de estos por huesos de animales en la investigación de una forense titular del CNP, el de Mari Luz Cortés, cuyo asesino estaba libre por un fallo judicial...entonces uno no puede evitar preguntarse ¿Cuántos elementos de este tipo estarán sueltos por la incompetencia administrativa? Cuando veáis el documental, veréis como un periodista está grabando tranquilamente delante del cuerpo de la victima tapado únicamente por una manta térmica, mientras los técnicos de limpieza del ayuntamiento ESTÁN LIMPIANDO LA ESCENA DEL CRIMEN. Sí, limpian a manguerazos la escena de un asesinato. Y no, esto no era el año 1950, hablamos del año 2003. A esto hay que sumarle que el forense que examina el primer cadáver no fue capaz de determinar que la causa del asesinato fue por herida de bala. Además, Alfredo Galán introdujo una pistola dentro de un televisor a través de un aeropuerto, en una época donde los escáneres estaban totalmente establecidos. Como podéis ver, sucesión total y absoluta de incompetencia, una detrás de otra. Por no hablar de que en ese Madrid de Gallardón y Aguirre, moría una persona asesinada cada 62 horas.

Dicho esto, también tenemos a muchos "expertos" que no pretendo quitarles importancia o relevancia a sus títulos, pero zapatero a sus zapatos...lo que no puede haber es un montón de criminólogos que son una suerte showmans que se dedican a pasearse por platós de televisión soltando sandeces amparados en su posición de "profesionales" en la materia, y creo que el caso de este hombre y la accidental relación con el naipe y los argumentos, a cual más fantasioso, que elucubraban estos expertos es una clara muestra de esto.

Y por último, tenemos a la tercera pata de este banco. Como antes mencionaba, vemos a un periodista grabando delante del cuerpo la víctima, un impresionante charco de sangre. El morbo televisivo servido en bandeja. Para todos los públicos. Sin el más mínimo respeto para la víctima ni para su familia. Y una vez más. En otro documental, pude ver como la periodista Maika Navarro, de La Vanguardia, se llevaba por delante una investigación de los Mossos d'Esquadra de varios meses de trabajo, al publicar la foto de un asesino en búsqueda y captura porque "sus jefes la presionaban". Medios de comunicación y periodistas que prostituyen el trabajo de la información, que son expertos en la creación de alarmas sociales y como no, por supuesto, el enaltecimiento de psicópatas como es el de este caso, al que la prensa le hizo la rosca y lo motivó a seguir actuando de la misma manera. Como decía al principio de esta crítica, planteaos el hecho de que cada 62 horas se asesinaba a una persona en Madrid, una diferencia abismal respecto a lo que pasa hoy en día. Cuando sentís que había más sensación de inseguridad respecto a los medios? Porque hoy en día, en base a lo que dicen los medios, parece que asesinen a 20 personas al día. Da para reflexionar.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Diego
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
15 de junio de 2023
14 de 21 usuarios han encontrado esta crítica útil
No puedo decir que sea un mal documental. El propósito principal de cualquier producto televisivo es entretener y enganchar (no entiendan este comentario como frívolo) y eso lo consigue.

Vamos por partes. El aspecto visual es en mi opinión muy bueno. Recreaciones sin exceso de dramatización, con juegos de luces y sombras acertadísimo. se consigue hacer uno una idea bastante buena de las escenas. La música y el sonido, correctos, con una música muy acertada también sin caer en estridencias. También juegan muy bien con los silencios o con fondos sonoros de radio y tv del momento, lo que queda muy bien.

El ritmo es bueno, porque hay que partir del hecho de que todo en un documental lo condicionan los "documentos" valga la redundancia, de los que se tiene disponibilidad. Realmente no hay mucho, en global. Por ejemplo el acusado no dice una palabra en todo el documental, y es que no habló en el juicio, ni antes ni después. Los familiares tampoco quisieron participar, así que la guionización del material ha sido el hilo conductor. Hay un poco de "Cliffhanger" pero en dosis controladas, pues el final del episodio 1 y 2 te deja con ganas de resolver; no es que sea un aspecto negativo tampoco, la verdad.

Las víctimas tienen mucho espacio en el documental y de hecho es el aspecto mejor del documental. No sabía que el Estado no se había hecho cargo de las indemnizaciones a pesar de ser dictado así por el tribunal. Escandaloso. Ya que hablamos de Estado y por lo tanto de política aquí sobresale el aspecto menos acertado y más artificialmente introducido: La orientación política del acusado. Según algunas fuentes la (supuesta) ideología ultraderechista del acusado fue determinante en sus hechos delictivos. Se hace una asociación gratuita completamente entre ambos hechos. Ni los abogados, ni los medios principales, ni las víctimas, ni los hechos en sí mismos, ni la policía, ni la guardia civil, ni las conclusiones de la sentencia,... nadie salvo una periodista investigadora de un medio bastante marginal da valor al tema. Pues en documental, esta voz aparece repetidamente con insistencia asociando los hechos, insisto, gratuitamente. Ni aplaudo ni justifico estas posturas políticas (ni tampoco otras igualmente peligrosas de signo inverso) pero es que sencillamente se fuerza esta asociación de forma muy descarada. Insisto, punto negativo.

También es curioso que se hable de que por motivos políticos se intentó encerrar a un falso culpable con la idea de ganar votos. En estas escenas (oh casualidad) aparecen imágenes random de políticos del PP, que además ganaron las elecciones en Madrid. No obstante nada se dice de que fue el gobierno de signo contrario el que negó la indemnización a las víctimas. ¿Casualidad?

Creo que se le da poco peso a la opinión de profesionales de la psiquiatría. El psiquiatra forense que llevó el caso no es un buen aporte, no por escasa profesionalidad sino justo lo contrario. Él no se va a salir del informe y la oficialidad, así que no deja espacio a una legítima especulación. Aparece muy de pasada una opinión de Vicente Garrido, pero de apenas unos segundos, una pena.

Quedan incógnitas que el documental no resuelve. ¿Qué hay de la familia del acusado? ¿Nadie cercano habla? ¿Por qué los naipes? ¿Qué intencionalidad hay en la carta escrita desde la cárcel? ¿Qué vida lleva allí el acusado?

Hay otro sinsabor pendiente: La policía y la guardia civil. ¿Por qué los hacen quedar como unos patanes? Tampoco eligieron para hablar a los más locuaces, cierto, pero tarde o temprano lo hubiesen pillado. Es muy arriesgado aventurarse a pensar que nunca lo hubiesen pillado sin entregarse. La estadística juega muy en contra de esta opinión que sin fundamento se deja caer en el documental.

Resumiendo: Buen documental con buen ritmo, algunas sombras de intencionalidad ideológica y algunas incógnitas abiertas.
Sildoir
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
18 de octubre de 2023
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Lo primero de todo, el relato del asesino de la baraja es escalofriante por el principal hecho de que no había un patrón fijo, podíamos ser cualquiera de nosotros. El miedo en el cuerpo.

Pasan los años y Netflix se decide a lanzar un ¿Documental? sobre el asunto en sí.

Y no se equivoquen:

Si son conocedores del caso, de las fechorías del señor Galán y tienen unos patrones o conocimientos previos sobre el caso, la serie no les va a otorgar absolutamente nada.

Si no lo son, ofrecerá una recreación decente, pero aquellos que busquen un enfoque más criminal o centrado en las evidencias científicas, se van a quedar a medias.

Si buscan un entretenimiento rápido, no les preocupa quién sea entrevistado y creen que este documental puede proveer rápidamente de la información, en ese caso supongo que es un elemento válido.

Y no se equivoquen, a cada uno lo que le llame la atención, pero considero que un documental que se enfrente contra la psique de semejante elemento, debe de contener un añadido sobre su psicología, balística, etc y menos sectores sobre el periodismo, como lo vivieron los periodistas o como una persona decidió que Galán estaba en un grupo de radicales de derecha.

Y es que a veces el documental da la sensación de querer influir con términos actuales (de hecho lo de la inclusión en grupos radicales queda dejado de lado y no aporta nada) y con menciones que parecen hechas para intentar concienciar al personal (ya verán lo necesaria que era la mención al PP por ejemplo) que a un documental sobre el asesino en serie.

¿El resto? Algún detalle curioso y una división que bueno...a medio gas (el juicio, un episodio entero sin mucha chicha).

Eso sí, lo de recrear los momentos previos a los asesinatos, parcialmente acertado.

Pero vamos, que no entiendo muy bien cuál es el objetivo de un documental que con tan sólo tres episodios, consigue hacerse aburrido.
Nadaqueperder
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
3 de febrero de 2024
Sé el primero en valorar esta crítica
Interesante documental sobre el desconcertante caso de "El asesino de la baraja" Alfredo Galán Sotillo, exmilitar y asesino en serie que su caso obtuvo una repercusión mediática sensacionalista al perpetrar distintos asesinatos en Madrid capital, dejando una carta de la baraja española (palo de copas) de manera ascendente en el escenario del crimen. No había un móvil, no había un fin, cualquiera que se topase con él podía ser víctima de su pistola Tokarev. Trabajadores de aeropuerto, estudiantes ecuatorianos, parejas inmigrantes, porteros de edificios, clientes de bares... Nadie estaba a salvo de él durante Enero a Marzo de 2003.

El documental en sí no aporta nada que no se sepa ya y es más una puesta en escena del caso para los desconocedores del mismo. Interesante visión también el desmitificar a estos "elementos" como seres perfectos e inteligentes, siendo totalmente lo contrario. Duras declaraciones de diferentes supervivientes y víctimas, y diferentes hipótesis con incoherencias son planteadas dentro de esta miniserie con escenas reales del juicio y material televisivo recuperado de la época. No se profundiza en ningún momento el por qué de todo y tampoco es buena fecha para sacarlo pues en unos años quedará obsoleto cuando Alfredo (ahora Rubén pues cambió de nombre) salga de la cárcel en 2028 tras cumplir 25 años de condena. Ni él ni su familia quisieron participar en el documental, que deja prácticamente igual al que esperaba algo revelador de un caso magnificado por la prensa.

Ineptitud policíal en un caso que sin la colaboración directa del propio asesino y el alcohol, seguramente hubiese tenido otro nudo distinto en un momento bastante alto de tensión delictiva.
Vampiro
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
4 de mayo de 2024
Sé el primero en valorar esta crítica
"Baraja: la firma del asesino" es un documental intrigante que explora un caso de asesinato que capturó la atención pública en Madrid en el año 2003. Estructurado en tres episodios, el documental ofrece una mirada detallada y profunda a diferentes aspectos del caso.

Una de las fortalezas del documental es su capacidad para arrojar luz sobre la complejidad del caso y las diversas teorías que han surgido en torno a él. Al centrarse en un evento criminal real, ofrece una visión fascinante de la psicología humana, la investigación policial y el sistema legal.

Sin embargo, la forma en que se presenta la información y se narra la historia puede afectar significativamente la experiencia del espectador. Un ritmo lento o una narración confusa podrían hacer que el documental sea menos efectivo.

Es crucial como el documental maneja el sensacionalismo de manera cuidadosa. Evita el exceso de dramatización o la explotación de la tragedia para mantener la credibilidad y centrarse en los aspectos más importantes del caso.
Daniel
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
1 2 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow