The Farewell

Película intimista, simple pero con magia, llena de amor por China y sus personajes, me gusta que Wang es sútil en mostrar las diferencias culturales del país de oriente, incluso es muy sútil en algunos diálogos que entran en la comparativa entre China y Estados Unidos. Pero de eso no es el filme, el filme es sobre la familia, sobre su definición no importa el idioma, porque el caso no es que la historia sea en China si no que familia tiene un significado parecido no importa el país y lugar, se trata de estar, de amar, de respetar. Nai Nai es un personaje adorable, me ha recordado a mi abuela en muchos tramos y me ha hecho reir de la emoción, y es que el filme logra eso, entrar en una posición de compartir experiencias y sentimientos sin entrar en juicios y diretes. El filme tiene secuencias notables, Wang sabe lo que quiere contar y lo hace con solvencia, mezclando incluso el humor y el drama de muy buena forma. Hacia el final, uno entiende aunque no acepte que las despedidas son parte de este transitar, estamos hechos desde muchas despedidas pero también estamos hechos de un tanto igual de bienvenidas. La actriz famosa de nombre Akwafina, para mi pasa sin pena ni gloria, de hecho se me hace un tanto inexpresiva, y hay algunos momentos donde el filme alarga demasiado sus escenas, aun con eso The Farewell es un filme enormemente tierno, realizado con notable amor y sutileza.

Lulu Wang nos presenta una de las mejores películas del 2019. Basada en hechos reales, cuenta la historia de una boda falsa como excusa para juntar a la familia y hacer una visita a la matriarca que le han diagnosticado cáncer. La historia se centra en la relación entre una nieta y su abuela y es algo maravilloso porque tanto Awkwafina que interpreta a la nieta, como Zhao Shuzhen que interpreta a la abuela están impresionantes. Lo mejor de la película a parte de la puesta en escena que me parece soberbia, hay planos maravillosos, los neones chinos y la estética china en general, lo mejor es que la historia se siente muy real en todo momento los planos de Lulu Wang reflejan muy bien por lo que está pasando Billi, la abuela que no sabe nada tiene reacciones muy sinceras como cualquier abuela que a su edad ya les da igual todo. Viendo la película se aprecia el cariño por toda la familia a Nai Nai y te lo contagia de una manera que solo puedes acabar emocionado. Por cierto, el final es hermoso.
Aprovechando el tirón de Parásitos, los que veáis esta película no dudéis en recomendarla, el cine asiático necesita visibilidad.

En The Farewell, Lulu Wang nos intenta enseñar una de las lecciones más importantes de la vida: cómo decir adiós a un ser querido y cómo prepararse para el momento final. Además, lo hace con enorme elegancia, sensibilidad, emotividad, dulzura, humor también y por supuesto mucho talento.
La peripecia de la familia Wang para ocultar a la matriarca que le queda poco tiempo de vida nos recuerda un poco a las aventuras de un entonces desconocido Daniel Brühl en Goodbye Lenin!, cuando intentaba ocultar a su madre enferma que el Telón de Acero había caído mientras ella permanecía en coma. La directora se toma su tiempo ara presentar la situación y a los personajes, y al espectador no le cuesta en absoluto empatizar con ellos, ya que resultan cercanos y muy simpáticos. Por supuesto, merece mención aparte la protagonista, Billi, una joven fuerte muy unida a su abuela, a quien da vida una excepcional Awkwafina. Creo que todos debemos una disculpa a esta actriz, ya que seguro que albergábamos prejuicios en su contra por tener nombre de rapera de tres al cuarto y no haber hecho gran cosa en el mundo del cine, y aquí da una absoluta lección de presencia, carisma y talento ante la cámara. No conviene olvidar tampoco a la adorable Nai Nai, interpretada por Zhao Shu-zhen, que está también maravillosa y encantadora.
Una fábula sobre nuestra relación con la muerte y cómo cada persona lidia con ella, especialmente cuando sabemos que va a venir. Excelente.

Lo mejor: Awkawafina y Zhao Shu-zen, fabulosas ambas, y su gran emotividad y encanto.
Lo peor: En realidad nada, salvo que no llega a ser una de las mejores cintas del año.

Esta película es formidable por su manera de llevar al cabo una gran tensión dramática. De todas maneras la dirección es muy original y atrevida. Utiliza silencio y primeros planos muy útiles para resaltar las emociones, que en esta película son muy importantes. La sencillez del guión resulta asombrosa y por medio de los diálogos te llevan por un camino del personaje interesante. El reparto es espectacular resaltando la actuación de Awkwafina. Esta película resulta emotiva, nostálgica y cómica. Muy recomendable.

No puede decirse que me haya gustado especialmente, es más, me ha parecido reiterativa y más bien aburrida con relación al metraje, aunque tiene toques de comedia y eso también la ameniza. Pero me quedo con la pátina de su mensaje, bueno discurso, sobre la muerte y aledaños en forma de una familia que se pasa medio metraje comiendo -como es usual en otras películas chinas- y otra media disimulando que la abuela… (no digo más aunque la ficha ya es explícita, como asimismo el título). Y es ese el personaje que da más marcha al asunto con sus gestos de ‘taichi’ y su verborreica -también mandona- personalidad. Son esas ‘sombras benignas’ las que planean sobre la historia, basada en una 'mentira real' y dirigida por una joven asiática, diría que trasunto de la fílmica entre Oriente y Occidente, que busca su lugar en el mundo a través de los sentimientos enraizados en las tradiciones, para otorgarle sentido... Que éste lo tenga o no, en mayor o menor medida, ya es cuestión de cada cual.