Alatriste

Pues yo le pongo un 10 y me quedo tan ancha. Está claro que no es (por ahora) una de mis películas favoritas, y por supuesto que se han hecho otras mejores, pero es una auténtica gozada. Jamás una producción española había lucido tan espectacular, tan internacional y a la vez tan patria. Refleja perfectamente ese declive del imperio español que se ha obviado en el cine durante tanto tiempo (en favor de mil y una películas sobre la Guerra Civil, por otro lado, casi todas excelentes) y el trabajo técnico es sobresaliente. Pero sin duda lo mejor es el admirable resumen que hace Diaz-Yanes de los cinco libros y su repart, la flor y la nata de nuestro cine con la impagable encarnación del protagonista a cargo de un inmenso Viggo Mortensen. Genial.

Lo mejor: La mayoría de los actores (Enrico Lo Verso, Juan Echanove, Ariadna Gil, Eduard Fernández... Todos excelentes), la espectacularidad de la puesta en escena y el final.
Lo peor: Unax Ugalde, Eduardo Noriega y el pequeño bache de ritmo que se produce hacia la mitad de la película.

Alatriste representa el honor y la película trata de eso. Hacer lo que debe hacerse, cumplir con el deber, ser fiel. Es un mensaje que para leerlo hay que elevarse, y la aventura - que la hay, y entretenida - es el instrumento que el director usa para hacerse escuchar y recrear en movimiento lo que Perez Reverte imaginó para la inmovilidad de la imprenta. Los paisajes, los vestidos, los detalles están cuidados y lucen perfectos. Viggo Mortensen, otrora vecino de Villa Ballester, provincia de Buenos Aires, aporta lo suyo con singular economía de recursos, a lo grande y sin duda, muy bien dirigido. Su compinche mercenario italiano hace también una composición realmente notable, de lo mejor que se puede ver en un cine. Los diálogos, los momentos, el montaje, los detalles fotográficos, la sobriedad del relato, nos muestran que don Agustín Díaz Yanes es uno de los mejores directores que pueden encontrarse urbi et orbi. Película magnífica, que a muchas personas puede parecerles un poco lenta, pero que no lo es, es que estamos acelerados.
El final de la película, es de antología, emblemático, definitivo. Una obra maestra.