Pesadilla en el Hotel Normandie

Soy cinéfilo y escritor de novelas, las cuales muestran una cierta influencia cinematográfica. Filmaffinitty es un punto de referencia para todo aficionado al cine, que desea saber si una película merece o no la pena, a pesar de que opiniones las hay como estrellas en el firmamento. De buena a mala, o simplemente pasable, la película que nos ocupa merece el calificativo de: REGULAR.
Ser original hoy día no es tarea fácil. Se podría decir que la presente se aparta de la norma imperante, pero esto por sí solo no basta. La película bebe de forma explícita de la fuente de El resplandor, aunque toda comparación con la película de Kubrick resulta harto complicada. La atmósfera está bien conseguida en esta película, así como la sinuosa música, y las interpretaciones son correctas. El terror es más bien psicológico y no se apoya en los efectos especiales ni en las truculencias, lo cual son puntos a su favor. Entonces... ¿qué es lo que falla? La respuesta es: el ritmo. Es un tipo de película que se complace en su estética y emplea largas y tediosas escenas que a partir de la mitad del metraje terminan siendo una repetición y por lo tanto aburren. Querámoslo o no, el ritmo lo es todo, tanto en literatura como en cine. Si esto falta, el interés palidece y uno termina languideciendo.

Un hotel cualquiera se convierte en un pesadillesco pasaje del terror para una familia estándar durante una noche en la que los sustos se suceden sin descanso, y el horror aumenta exponencialmente con el paso de los minutos, lo cual se acentúa gracias a la frágil presencia de un indefenso bebé y a una claustrofóbica ambientación.

Precisamente la puesta en escena es lo que más brilla en esta oscura producción que logra acongojar, por decirlo con suavidad, al espectador casi tanto como a su atormentado y excepcionalmente interpretado dúo protagonista. No diremos a que otra mítica película nos recuerda, pero goza de la suficiente identidad propia como para merecer ser sufrida/disfrutada por sí misma.

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Soy devoto del buen cine de terror y misterio. Creo que este filme entra mejor en el segundo apartado.

Comienza relativamente bien, con el hotel que no ofrece muy buenas perspectivas, especialmente por el ¿mendigo? que les advierte de algo de manera muy intranquilizadora.

Luego, la noche se hace toledana, con un ir y venir que, lejos de acrecentar mi interés, acaba por aburrirme.

Lo mejor, el trabajo de ambos protagonistas, lo peor, una historia demasiado errática que tiene un final poco redondo. Compruebo que hay quien ve un cierto eco de El resplandor. Creo que la de Kubrick la supera con creces, aunque no está de más recordar que King abominaba de esa adaptación (entrevista en The Paris Review).

Me gustó el homenaje a una pintura de Magritte, Reproduction interdite.